Economía circular en el Biobío: La llamativa iniciativa que convierte neumáticos botados en carpetas pedagógicas
Una llamativa iniciativa, liderada por Globalvia, busca convertir neumáticos desgastados y botados en el Biobío para convertirlos en carpetas pedagógicas. Este innovador proyecto de economía circular evidencia de que manera podemos convertir residuos en oportunidades para el medio ambiente y la sociedad.
En este contexto, uno de los objetivos de la empresa es reducir los impactos ambientales derivados de su actividad. Para ello, adoptaron medidas que permiten promover la circularidad y la eficiencia en el uso de recursos, lo cual se alinea con su misión de desarrollar infraestructuras sostenibles e integrando dos pilares fundamentales de su plan estratégico corporativo: la mitigación del cambio climático y la Responsabilidad Social Corporativa (RSC)
Cabe mencionar que la iniciativa contó con el apoyo de empresas expertas como Himce, responsable de la gestión de residuos, mientras que Recbio opera una planta de trituración de neumáticos en convenio con Rubtec, especializada en productos de caucho reciclado. En conjunto han logrado transformar los neumáticos recogidos en las tres concesiones que opera Globalvía (Autopista del Itata, Autopista Costa Arauco, y Autopista del Aconcagua) en 120 m² de pisos amortiguadores y de bajo mantenimiento.
Al respecto, Boris Benavente, responsable del Sistema Integrado de Gestión de Globalvía, indicó que "uno de los residuos que nos genera más problemas en las concesiones en Chile son los neumáticos. Entonces, buscamos un aliado, en este caso fue la empresa Himce, que nos hizo toda la gestión junto a otras empresas que son Recbio y Rubtec".
"Entonces, el proceso comienza con nosotros recogiendo los neumáticos en la ruta; nuestro gestor autorizado lo lleva a la planta donde lo chipean. Esta planta lo transporta a otra planta, que es donde se fabrica el producto y finalmente nosotros les compramos esta alfombra y lo traemos a los colegios donde lo vamos a instalar", sostuvo.
Beneficios para la comunidad educativa
A propósito del desarrollo de este proyecto, tres colegios se vieron beneficiados al quedar seleccionados para recibir estas superficies recicladas. Se trata de la Escuela Primer Agua en Penco, la Escuela Pilpilco en Los Álamos, ambos en el Biobío, y el Jardín infantil Mi Mundo en Colores de Til Til, Región Metropolitana.
Voluntarios de Globalvia y sus empresas colaboradoras trabajaron codo a codo en la instalación de las carpetas pedagógicas para así dar vida a estos espacios que ahora ofrecen seguridad y diversión a los más pequeños.
Sobre esto, la coordinadora de Educación Parvularia de la Escuela Pilpilco de Los Álamos, Margarita Mendoza, explicó que "nuestro establecimiento no cuenta con un espacio exterior exclusivo para el nivel de educación parvularia, que son niños de 4 a 6 años de edad. Por eso, ideamos este proyecto de instalar piso de caucho en nuestro patio y buscamos los auspiciadores para poder concretar este proyecto. En esto, Globalvia ha sido nuestro aliado hace un buen tiempo y les agradecemos por el apoyo".
"Esto va en línea con las políticas medioambientales y de relacionamiento con la comunidad que tiene Globalvia. Con este proyecto de economía circular, llevamos los neumáticos que se recogen en la carretera hacia una empresa que los procesa y los convierte en estas palmetas que instalamos en los distintos establecimientos de las ciudades donde operamos", expresó Moisés Vargas, gerente general de Autopista del Itata.
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