Adulta mayor de Concepción denuncia haber sido drogada con un papel para robarle
Una confusa y compleja situación vivió una familia penquista este miércoles 13 de noviembre. Acusan que una adulta mayor habría sido "drogada" y posteriormente manipulada para robarle altas sumas de dinero en efectivo y bienes.
El hecho fue denunciado por Elsa Placencia, hija de Elsa Figueroa, mujer de 75 años víctima de la situación. Según lo narrado, esto comenzó "a eso de las 10:00 horas del miércoles, cuando mi madre caminaba por la calle Aníbal Pinto. Una mujer se le acercó, le entregó un papel y después le comenzó a contar una historia triste sobre cómo no tenía donde dormir o para comer. Que venía de Talca a cobrar un premio y otras cosas; y le llamó la atención que tenía acento boliviano".
"En eso, llega otra mujer y entre las dos continúan ese cuento. Después de un rato toman una micro y vienen a nuestra casa, portando dos bolsas pequeñas. En ese momento, mi mamá les entrega aproximadamente 500 mil pesos, además de las joyas de su matrimonio con mi padre, que falleció hace 14 años", añadió.
Luego, "la llevaron al Banco Estado que está cerca del Sagrados Corazones. Ahí, sacó más de un millón de pesos en efectivo, y no más porque no se lo pasaron en caja. De ahí, pasaron al local Papa John's a comprar una pizza familiar y, en una vuelta que no entiendo bien, mi madre le pasó la tarjeta de crédito a una de ellas para pagar. De ahí, se quedaron con esa tarjeta y no se la devolvieron".
Elsa Figueroa posteriormente tomó rumbo a su casa, sin la compañía de estas dos desconocidas. "Ella llega sola y las dos mujeres se fueron a gastar la plata, por lo que vimos en la declaración de la tarjeta", narró.
Lo que vino después
Finalizada la cruel travesía, la familia se reúne en el hogar y llama a Carabineros, quienes al arribar "le tomaron la declaración pero no hicieron nada más. Les preguntamos si iban a constatar lesiones, pero solo le preguntaron a ella si se sentía bien. Respondió que estaba nerviosa, aunque también visiblemente ida, y el carabinero nos dijo que si queríamos, la podíamos llevar al médico".
Lo que buscaba el clan era obtener una orden de examen toxicológico para determinar si la señora de 75 años había sido drogada. Tras llamar a Policía de Investigaciones (PDI) y recibir una respuesta similar a la de Carabineros, no encontraron una forma de realizar dicha prueba.
La reflexión final de Elsa Placencia es que esta situación es "la típica donde gente se aprovecha de personas de tercera edad. Además, sostuvo que "mi madre tiene los cinco sentidos intactos y está sana, por eso nos extraña que haya actuado así sin alguna intervención o que haya estado drogada".
Hasta el momento, no hay detalles sobre la identidad, paradero o en que usaron el dinero las dos mujeres responsables.
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