Editorial: Se salvó la Corte Suprema, Fiscal Nacional no entregará audios

Hace ya bastante rato que la Corte Suprema está complicada tras la publicación de diversos reportajes periodísticos que han dejado al descubierto la forma de elegir a los ministros que integran el máximo tribunal del país.

No eran necesariamente escogidos por su brillante carrera en el poder judicial, sino más bien por tratativas, conversaciones, gestiones de diversos actores políticos con argumentos como por ejemplo que tal o cual magistrado podría ser más funcional para los intereses del gobierno de turno.

¿Cómo se conocieron estas negociaciones? A través de las conversaciones que sostuvo el abogado Luis Hermosilla durante años en el más absoluto de los sigilos y que quedaron al descubierto cuando la policía incautó su teléfono celular en el marco de las investigaciones por el llamado caso Audios.

La Corte Suprema tras soportar varios días la presión pública anunció la activación de su Comité de Ética, una instancia que se planteó el objetivo de investigar las designaciones. Para ello ofició a la Fiscalía solicitando se le entregaran los audios o mensajes del fono de Hermosilla donde él y otras personas negocian la instalación de tal o cual magistrado.

Estas últimas horas el Fiscal Nacional Ángel Valencia en el uso de sus atribuciones dijo que no! Que no iba a pasar copia de las conversaciones de WhatsApp o más bien que no podía, "lo solicitado contiene información incluida en investigaciones penales en curso, las cuales, de acuerdo con lo establecido en el código procesal penal y otras leyes vigentes, deben mantenerse en secreto" afirmó

Valencia agregó que tiene “el mayor ánimo de colaboración interinstitucional para el esclarecimiento de los hechos por parte de la Comisión de Ética de la Corte Suprema, conforme a las facultades del Ministerio Público”, sentenció el mandamás de la Fiscalía.

Para algunos la respuesta de Valencia era obvia y lo que técnicamente correspondía, pues las investigaciones efectivamente tienen reserva, pero para otros se intenta ocultar algo. Lamentablemente va a quedar en la opinión pública la idea de que los involucrados se intentan salvar y así seguirá ocurriendo hasta que no se formalice a Luis Hermosilla, una cuestión que muchos dudan hoy.

Punto aparte merece el hecho que técnicamente el Comité de Ética de la Corte Suprema ni siquiera tiene un código de ética actualizado para eventualmente sancionar alguna infracción. Así lo confirmó la ministra vocera del tribunal.

Recién en abril pasado se habría encargado la elaboración formal del documento, "en este momento está en modificación el Código de Ética y los procedimientos, porque hay que adecuarlos a las condiciones y la realidad actual. Se están analizando nuevamente, los parámetros o la normativa que va a regir la Comisión de Ética, que actualmente existe, pero con una mentalidad o con un espíritu que es muy antiguo”, afirmó la ministra María Soledad Melo Labra quien las oficia como vocera de la Suprema.

Raya a la suma. Al no poder acceder a los antecedentes de la Fiscalía, la Suprema no tiene como indagar el tema y por lo tanto lo más probable es que todas estas denuncias de supuesto tráfico de influencias en la designación de los altos magistrados queden en nada.

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