Editorial: El impacto en el programa de Testigos Protegidos
La noticia que publicaron todos los medios es que 3 Testigos Protegidos han sido asesinados estos últimos meses, 2 en la Región Metropolitana y uno en Ovalle. El hecho en primera instancia fue confirmado y luego desmentido, ya le contaremos más de esto.
El sistema de los testigos protegidos nace con la Reforma Procesal Penal en diciembre del año 2000. Recordemos que primero se implementó en las Regiones de Coquimbo y la Araucanía. Más tarde ingresaron de manera gradual las otras regiones del país hasta el año 2005, cuando ya estaba en pleno régimen en todo el territorio nacional. Así nacieron la Fiscalía, la Defensoría, los Juzgados de Garantía, los Tribunales Orales y el Programa de Víctimas y Testigos a cargo del Ministerio Público.
La Unidad de Víctimas y Testigos nace porque, "los testigos pueden sufrir amenazas, hostigamientos o atentados en contra suya o de su familia, como consecuencia de su participación en el proceso penal", ¿quién dice esto? Precisamente el Ministerio Público en su página web.
Y ¿cuál es la misión de la unidad de víctimas y testigos según la propia Fiscalía? "evaluar el riesgo a que puedan estar expuestas estas personas, como consecuencia del delito o de su participación en el proceso penal, e implementar las medidas de protección que resulten necesarias para su seguridad y para facilitar su participación en el proceso".
Consultada por el tema la Jefa Nacional de la Unidad de víctimas y testigos Alicia Díaz calificó las 3 muertes como un asunto muy menor. "Nosotros tenemos -de modo permanente- una división que lleva muchos años en funcionamiento. Como dato, el año pasado tuvimos más de 13 mil testigos con protección y todos esos testigos recibieron sus medidas y no tuvimos ninguna persona que falleciera en el proceso penal”.
Horas más tarde el Ministerio Público emitió un comunicado donde se afirma que "ante distintas versiones de prensa que sindican como testigos protegidos a víctimas de asesinatos ocurridos en Lampa y Ovalle, como Ministerio Público queremos aclarar que dichas personas no estaban siendo parte de ningún programa de protección al momento de ocurridos los hechos y, al ser investigaciones reservadas, nos vemos impedidos de referirnos a ellas con el fin de proteger las indagaciones y resultados futuros".
O sea, primero la Jefa de la Unidad de Víctimas y Testigos lo confirma y después su institución lo desmiente. En este contexto no queda claro el asunto, solo el hecho que son investigaciones reservadas.
Lo que si podemos afirmar con todo esto, es que no es menor el asesinato de 3 personas, aunque estadísticamente sea una cifra pequeña, segundo va a haber indudablemente un impacto público al programa de víctimas y testigos. ¿Cree usted que ahora una persona que ha sido testigo de un homicidio, por ejemplo, sobre todo si es protagonizado por bandas asociadas al crimen organizado ¿va a estar dispuesto a colaborar con la justicia? Por lo menos lo va a pensar dos veces.
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