Editorial: ¿Por qué el Alcalde Jadue si y Cathy Barriga no?

Probablemente si hace un par de semanas preguntáramos a los integrantes del Partido Comunista nadie habría imaginado a Daniel Jadue de amarillo y con esposas.

Es la imagen que pudimos ver ayer en la tarde tras la formalización de cargos por los delitos de cohecho fraude al fisco, estafa y administración desleal en contra del alcalde de Recoleta.

El Ministerio Público define la formalización de la investigación como "la comunicación que el fiscal efectúa al imputado, en presencia del Juez de Garantía, de que desarrolla actualmente una investigación en su contra respecto de uno o más delitos determinados. Su comunicación produce una serie de efectos procesales entre los que destacan que da inicio al plazo de investigación, suspende el curso de la prescripción y el Ministerio Publico pierde la facultad de archivar provisionalmente la investigación".

La formalización no es más que eso, un acto administrativo donde formalmente se comunica a una persona que está siendo investigada, lo que en esta oportunidad puede hasta sonar raro pues todos en Chile sabíamos hace ya varios años que la Fiscalía indagaba por estas irregularidades al alcalde Jadue, incluso lo interrogó varias veces.

Una formalización no es sentencia, no es condena, no significa que una persona sea culpable de algún delito. Sin embargo, para formalizar el persecutor o fiscal debe formarse el convencimiento de que hay responsabilidad del imputado y para ello debe reunir las pruebas...y si a este hecho le sumamos lo dicho por la jueza Paulina Moya en términos de que se dan por acreditados los delitos, lo cierto es que Daniel Jadue tiene un panorama judicial muy complicado.

Muchos en redes han dicho que el alcalde se fue a prisión solo porque el hecho de ser comunista o porque hay una especie de persecución política. Lo primero fue desechado por la propia jueza quien antes de su veredicto afirmó que no se falla por ideologías y lo segundo cae por su propio peso pues requeriría de una especie de complot o colusión al más alto nivel que implique acuerdo del que denuncia con los fiscales (no uno sino varios), los peritos, las policías, testigos, con el propio fiscal nacional y ahora con la jueza Paulina Moya. Este argumento no resiste ningún análisis.

Jadue se fue a prisión porque hay suficientes antecedentes para al menos formarse convencimiento en el Ministerio Público de que estamos frente a delitos de corrupción.

Si se ve feo a nivel de opinión pública, que Jadue se haya ido a prisión y Cathy Barriga no, ¿por qué ocurre esta diferencia? en lo técnico suponemos porque Jadue estaba en ejercicio y estando en libertad podría seguir siendo alcalde y por lo tanto podría seguir administrando los recursos de la comuna.

De igual forma creemos desde esta tribuna que si una autoridad de derecha, de izquierda, de centro, azul, verde o amarilla es electa o designada para trabajar por sus vecinos y se la formalizan cargos en su contra debe abandonar el cargo de inmediato y todos debieran ir a prisión como medida cautelar. Los delitos de corrupción, aquellos que defraudan la fe pública debieran ser de los más graves de nuestro ordenamiento jurídico y hoy no lo son.

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