Urgencia por la donación de órganos: Habitante del Biobío con extraña enfermedad requiere trasplante de hígado
A sus 30 años, Esteban Gallegos Riquelme vive con el síndrome de Budd Chiari, una patología que impide la circulación sanguínea al hígado y que lo tiene a la espera de un trasplante. El joven sufre secuelas como el deterioro físico, urgencias médicas y constantes hospitalizaciones que lo mantienen alejado de su familia.
En el 2016, al oriundo de Laja se le diagnóstico un daño hepático crónico. Años más tarde se confirmó que padece esta extraña enfermedad, con una incidencia de 1 caso en 100 mil personas o incluso menos.
En el último tiempo, la salud de Gallegos ha atravesado uno de sus peores momentos. "Comenzó con una peritonitis bacteriana en agosto, estuvo quince días hospitalizado en Concepción y se le provocó una hernia umbilical. En septiembre tuvieron que operarlo de urgencia", compartió su cónyuge, Alejandra Gallardo. Desde entonces, en enero, "cayó al hospital por una peritonitis nuevamente", que le causó una "obstrucción intestinal y una hemorragia digestiva grave", agregó.
Aunque la mejor chance de Esteban para retomar su vida es un trasplante de hígado, "está tan deteriorado, tan bajo peso, que no resistiría ahora", comentó Alejandra. Otro problema es la larga espera, porque "aquí en Chile no hay cultura de donación".
"Quizás la gente pueda ser más consciente de lo que se gana donando un órgano", señaló Gallardo. Quien comprende el dolor de perder a alguien, pero "dentro de ese dolor también está la posibilidad de darle vida a otra persona".
En esta lucha, la familia invierte la mayoría de su dinero en el traslado desde Laja hacia Los Ángeles, Concepción y Santiago, donde esperan un trasplante a través del Sótero del Río. Además, necesitan donadores de sangre en el hospital angelino y reciben aportes monetarios a la Cuenta Rut de Esteban Gallegos Riquelme, RUT 18.420.349-9.
Vecino de Laja con raro síndrome está a la espera de un trasplante de hígado
Esteban Gallegos Riquelme tiene 30 años y vive con el síndrome de Budd Chiari. En el 2016, mientras trabajaba como técnico en enfermería en Concepción, descubrió que padecía problemas hepáticos. El joven disfruta de tocar bajo, guitarra y cantar en el coro de su iglesia en Laja.
El 2018, mismo año que conoció a Alejandra, le confirmaron que tenía esta extraña enfermedad. "En el fondo, las venas que llegan el hígado generan trombos. Y esos trombos provocan que no llegue la irrigación al al hígado (...) él está viviendo con un hígado que prácticamente no funciona", explicó su esposa.
Ese año empezó a vivir las secuelas más fuertes del Budd Chiari, que ya no le permite trabajar. Esteban está bajo peso y presenta ascitis, la acumulación de líquido en su estómago. Una condición que le provocó una hernia y por que la recibió cirugía. La peritonitis también lo ha atacado en múltiples ocasiones y lo ha tenido hospitalizado por más de 18 días en Los Ángeles.
A pesar de que su estado lo dejó en mayor prioridad para obtener un trasplante, su cuerpo no sería capaz de aceptarlo. "Entonces el plan ahora es fortalecerlo, nutrirlo, que él pueda subir de peso", dijo Gallardo, siguiendo el consejo del médico tratante que los atiende en el Hospital Sótero del Río en Santiago.
La pareja tiene un hijo, Simón, quien nació con síndrome de Down y además sufre cardiopatía. Cuando están juntos intentan salir y disfrutar de las cosas pequeñas. "Se nos hace difícil no tener a Esteban en la casa. Somos una familia, hay un niño de cuatro años que necesita a su papá y una esposa que lo necesita. Quizás la gente pueda ser más consciente de lo que se gana donando un órgano", explicó la mujer.
Llaman a fomentar la donación de órganos: Familia recibe ayuda para paciente del Biobío
Alejandra Gallardo, quien es educadora diferencial, es el único sustento de la familia y dedica la mayoría de su tiempo en cuidar de Esteban y Simón. Debido a su enfermedad, su esposo ya no puede trabajar y optó por la pensión de invalidez.
"No hemos tenido dificultad para acceder a los medicamentos", mencionó la mujer, pero "el costo monetario de la enfermedad es el tema de los traslados. Costearnos los viajes a Santiago, los controles a Concepción, todo lo que significa llegar hasta allá se tiene que hacer de forma particular".
Por ejemplo, antes de su última hospitalización, Esteban debía realizarse la "paracentesis, que es sacarle el líquido ascítico que se acumula porque el hígado no funciona. Son dos veces a la semana, estábamos viajando todas las semanas una vez a Concepción y una vez a Los Ángeles", explicó Gallardo. Ya que divide su tiempo entre los controles de Simón y los de Esteban, tampoco ha podido acercarse a la municipalidad angelina para obtener apoyo.
"Como familia se han hecho rifas, beneficios y completadas para solventar un poco los gastos que involucra tener a una persona hospitalizada", agregó Alejandra. Pero no ha sido suficiente y están recibiendo aportes monetarios a la Cuenta Rut del paciente, al 18.420.349-9.
Asimismo, están en medio de una colecta de sangre, "es un apuro que tenga la sangre a disposición para controlar la anemia", dijo la educadora. Para apoyarlo, se pueden agendar horas a los números (43) 2 336 797 o (43) 2 336 011 en el Hospital Víctor Ruiz Ríos y otros puntos de Los Ángeles.
Para el futuro del joven, su familia espera que se regule su condición médica y pueda recibir un trasplante de hígado. Por lo que llaman a cambiar los paradigmas sobre la donación de órganos y a "darle vida a otra persona", indicó Alejandra. De esta forma, Esteban Gallegos tendría una oportunidad de ver crecer a su hijo Simón.
Revisa más noticias de la Región del Biobío. Síguenos en Facebook y en Instagram para más información y fotografías de la contingencia del Gran Concepción.
