Vecinos de toma en población Juan Riquelme de Concepción cuentan su verdad y denuncian grave daño sicológico a los niños y niñas

Toda historia tiene dos caras. Pasa lo mismo en el conflicto que se ha suscitado entre los vecinos de la población Juan Riquelme y una toma instalada hace algunos años en el espacio donde estaba el antiguo peaje.

Recordemos los hechos; el pasado domingo 17 de diciembre ocurrió un homicidio en la toma. Falleció un hombre de 21 años de nacionalidad extranjera y que se encontraba irregular en el país, al interior de lo que se denunció era un prostíbulo.

El hecho de sangre motivó una serie de movilizaciones de los vecinos de la población con instalación de barricadas y exigiendo mayor seguridad a las autoridades.

Vecinos de campamento Renacer entregan su versión

La toma de población Juan Riquelme tiene nombre, se llama "Renacer". No hay precisión de la fecha de su nacimiento, pero existe desde hace unos 6 años. Los vecinos están organizados, son 101 personas, de ellos 41 son niños. La gran mayoría de quienes residen en la toma son efectivamente extranjeros.

Contactamos a la presidenta del comité. Ella es Lucia Fuentealba y vive en este lugar desde que nació la toma. Es mamá soltera tiene dos hijos, una niña y un niño de 6 y 10 años, respectivamente. Ambos van al colegio más cercano.

Con respecto a las acusaciones de prostitución y narcotráfico que hacen algunos vecinos manifiesta con seguridad: "Eso es mentira, es mentira que hay prostitución. Narcotráfico existe, no lo puedo negar y no lo hemos podido sacar, pero también hay narcotráfico en la población", indica.

Por las protestas de los vecinos señaló: "Yo entiendo la rabia que tienen y todo eso, pero no se están dando cuenta del daño que hacen. Ingresaron a esa casa y robaron las cosas de las personas. No debería haber pasado eso y Carabineros tampoco hizo nada. Nos querían quemar las casas, incluso tiraron piedras, hubo niños que recibieron pedradas. Les han dicho a los niños que se tienen que ir, que los van a sacar", manifiesta.

Presentarán acciones legales para proteger a los niños

La presidenta del comité Renacer, Lucia Fuentealba agrega a Sabes.cl que hay acciones legales que han presentado con intentos anteriores de desalojo: "Ahora vamos a meter otra, por el daño sicológico sobre todo a los niños", culmina.

Natalia Sánchez es otra vecina que habita la toma. Vive hace un año en este lugar. Trabaja instalando cerámicos junto a su pareja y manifiesta que como cualquier chileno llega solo a descansar a su casa.

Es más crítica con el accionar de los vecinos que quieren sacarlos: "Yo tengo videos donde nos amenazaron que nos iban a quemar la casa y toda la toma completa. Los niños están con un grave daño sicológico, vino la sicóloga del consultorio Chaimávida, ayer vino la municipalidad. Tenemos que poner una denuncia por amparo para proteger a los niños. Esto fue grave. Estuvimos escondidos como 4 ó 5 días y ellos andaban haciendo vandalismo muertos de la risa protestando y robando la barraca ¿De qué hablamos?", culminó.

Los venezolanos en la toma de Juan Riquelme: "No somos animales"

Rocelins Cequera es venezolana, vive hace unos 4 años en la toma. Estuvo en la población pagando arriendo como cualquier vecino, pero al final el problema económico pudo más.

Rocelins es técnico superior universitario y también administrador de empresas, hoy está cesante, vive en el campamento junto a su pareja, su suegro, sus 6 hijos y un sobrino.

"La casa donde ocurrió el crimen no era un prostíbulo como se ha dicho", parte su relato.

"El señor tenía fiestas, pero eran internas y en general no molestaban a la población. El muerto y los participantes de la fiesta no eran de la toma. El tema de la droga es una lucha interna que tenemos, pero eso pasa en todas partes. Lo que pasó les vino como anillo al dedo a los vecinos que siempre nos han querido sacar, nos culpan de todo. A mí me sorprendieron mucho las manifestaciones porque muchos de los que estaban ahí se la pasan acá haciendo carretes, fiestas internas", señaló

"Nosotros no somo animales - agrega- somos personas. Mi hijo participa en el club de fútbol de la población y es muy reconocido. Nos atendemos en consultorio de Chaimávida y ahí conocen nuestro proceder".

"Siempre hemos cuidado que esto no se contamine. Hace un tiempo llegó un señor con una guagua de 9 meses. Nosotros les dijimos nuestras normas, buen comportamiento y todo eso. Resulta que el señor empezó a robar a nosotros y en la población. Nos enteramos y lo quisimos expulsar, hicimos denuncia. Pero vino la población con la fuerza y lo golpearon, siempre actúan con la fuerza y esto que ha pasado les vino como anillo al dedo para sacarnos. Somos luchadores y trabajadores, nos tildan como delincuentes y prostitutas y no lo somos", afirma.

Fuentes consultadas por el MOP con respecto al eventual desalojo de la toma nos señalaron que desde la inspección fiscal de la concesión se trabaja en la restitución de la faja.

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