Someten a proceso por encubrimiento a ex oficial de la Armada en Talcahuano por muerte de grumete en Dictadura
En calidad de encubridor de un crimen de lesa humanidad se declaró a Vicente Francisco Montecino Billeke, ex teniente de la Armada y comandante de reclutas de la Base Naval en Talcahuano, por la muerte de un grumete entre el año 1975 y 1976, en plena Dictadura Militar.
Así lo dictaminó el ministro en visita por violaciones a los Derechos Humanos Carlos Aldana el pasado 20 de septiembre. La investigación siguió el sospechoso fallecimiento del conscripto Luis Alberto Villegas Meza, de 19 años, comprobando que hicieron pasar su muerte como un suicidio. Cuando en realidad la víctima murió por acción de terceros a pocos días de empezar su instrucción militar.
Ex oficial de la Armada es procesado por encubrimiento a la muerte de un grumete en Dictadura
Los antecedentes señalan que el 1 de octubre de 1975, Luis Villegas ingresó al Destacamento N°3 de la Armada de Chile, ubicado en la Base Naval de Talcahuano. Una semana después, el 8 de octubre, informaron a su madre, Consuelo Meza, de su desaparición.
En una visita al Fuerte Borgoño, el entonces teniente Vicente Montecino le entregó a Meza un papel encontrado en la chaqueta de Luis. El que sugería que se iba a quitar la vida.
Este hecho sembró dudas en la madre del joven, ya que Villegas postuló tres años para entrar a la institución naval por la que tenía una ''pasión loca''. El grumete hasta les escribió cartas, que arribaron dos días después de su desaparición, donde comentaba lo feliz que estaba.
El oficial retirado Vicente Montecino, procesado por el delito de encubrimiento al homicidio del grumete en Talcahuano, también le dio a Meza dos cinturones y un gorro de la infantería marina.
Madre de grumete escribió a Lucía Hiriart por desaparición en Base Naval de Talcahuano
Casi un año transcurrió entre la devastadora desaparición de Luis Villegas y la decisión de su madre, Consuelo Meza, de escribir a la entonces primera dama Lucía Hiriart. En 1976 le dirigió una carta pidiendo ayuda para encontrar a su hijo.
Las gestiones de Meza habrían alcanzado al Servicio de Inteligencia de la Segunda Zona Naval de Talcahuano. Al mes siguiente, personal de la Armada se presentó en su casa para informarle el descubrimiento de un cadáver que el Juzgado Naval investigaba por presunto suicidio.
Según las pericias de la institución, el 1 de diciembre de 1976 encontraron el cuerpo en descomposición del grumete Villegas colgando de un árbol de las instalaciones. Este vestía su uniforme de infantería marina y elementos similares a los que entregó Montecino a su familia.
La búsqueda por un desenlace a la muerte del grumete Luis Villegas en Dictadura
En 1982, la familia de Villegas recibió un certificado de defunción donde Luis era declarado como NN. Años más tarde, a principios de los 90, les llegaron sobres anónimos con mensajes confusos sobre la muerte del grumete. Estas misivas señalaban al ''cabo Guerra'', ''torturas'', ''juntos'', ''víctima'', entre otras frases.
Estos datos fueron suficientes para fortalecer la idea de asesinato del recluta, por lo que los presentaron a la Comisión Rettig. Sin embargo, en 1993 estos les informaron que no bastaba con los antecedentes para declararlo como víctima de violación a los Derechos Humanos.
Nélida Villegas, hermana del grumete desaparecido, decidió denunciar los hechos a la Policía de Investigaciones el 2001. Mientras que no obtuvieron respuestas satisfactorias, ni lograron encontrar al cabo mencionado, el ministro Juan Guzmán ordenó la exhumación de los restos de Luis.
En 2003, se comprobó que la osamenta enterrada como Luis Villegas sí pertenecía al grumete. Esta fue devuelta a la familia para su entierro. En el 2022, nuevamente fueron exhumados del Cementerio Municipal de Coronel por orden de Carlos Donoso.
La investigación del ministro en visita de Derechos Humanos determinó por segunda vez que los restos óseos tienen un 99,999996% de corresponder a Luis Alberto Villegas Meza.
Esta también declaró como encubridor del delito de homicidio simple a Vicente Francisco Montecino Billeke, ex teniente de la Armada que entregó las posesiones del joven a su madre. Bajo el mandato de Donoso, Montecino tendrá que someterse a un examen mental que dará inicio al procesamiento del ex oficial de la Armada.
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