Editorial: Plan búsqueda DDDD había que hacerlo, pero llega tarde
Ayer en el Día Internacional de los DD.DD. el Presidente Gabriel Boric lanzó el plan de búsqueda.
En Chile actualmente permanecen más de 1.469 personas detenidas desaparecidas, en el Biobío son 149 las familias que aún no saben nada de sus seres queridos.
"¿Cómo se enfrenta una búsqueda cuando te dicen que acá no se ha perdido nada?, ¿en qué momento después de golpear tantas puertas se asume la muerte?, ¿cómo se responde a quienes invitan a olvidar y a quienes niegan lo que ocurrió?". Así comenzó su discurso el primer mandatario.
Este plan de búsqueda fue anunciado hace mucho tiempo, talvez más de un año y se concreta tras una serie de reuniones que Boric sostuvo con distintas agrupaciones de víctimas de las violaciones a los Derechos Humanos, por lo tanto, de este plan ya se sabía.
La ausencia de algunos personeros de la derecha en esta ceremonia y la excusa de que no habían sido invitados no es más que eso, una mala excusa. Lo que sucede en realidad es que aún hoy hay personas de derecha -no creo que todos- que justifican las violaciones a los derechos humanos, por lo tanto, esto sigue siendo un tema muy incómodo para ellos.
El plan de búsqueda de DD.DD es más bien un esfuerzo de coordinación de instituciones que de inyección de recursos, y lamentablemente llega tarde.
Así lo manifestó hace algunas semanas la presidenta de la agrupación de detenidos desaparecidos del Biobío Ester Araneda. Hay que hacer el esfuerzo claramente, pero el éxito de un plan como este habría sido distinto en los 90 recién llegada la democracia cuando muchos de los autores de estos delitos o los testigos aún estaban vivos.
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