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Un escándalo de produjo luego que se filtrara un protocolo comunicacional enviado por la Intendencia de Ñuble, que buscaba sacar provecho comunicacional y ensalzar la figura de Sebastián Piñera en medio del reparto de cajas de alimentos.
En dicho documento se instruía a los funcionarios a cargo de repartir las cajas a la población que publicaran en Twitter dos posteos utilizando siempre la etiqueta #AlimentosParaChile y una frase “valorando al Presidente Sebastián Piñera”.
En el caso de los registros en video o fotografías para difundir la entrega,se solicitó “funcionarios bajando cajas y entregándoles a las familias”.
“Preocuparse de que sea un buen tiro de grabación y de que no tenga contaminación visual (publicidad que induzca a críticas, carteles con mensajes negativos, gente revisando celulares, etc.)”, continua la misiva.
La explicación
Tras lo ocurrido, mediante una declaración la Intendencia de Ñuble explicó que el protocolo filtrado correspondería a “un borrador de uso interno” que “sirvió de base para la elaboración de un nuevo protocolo, único y final, diferente al filtrado a la opinión pública”.
"Lamentamos la interpretación que se le dio a este escrito, puesto que no es el documento final y no refleja el real objetivo de la campaña Alimentos para Chile", concluye el mensaje.
La polémica generó el rechazo tanto en la oposición como en Chile Vamos.
Por su parte, el senador Alejandro Navarro (PAIS - PRO), confirmó que recurrió a la Contraloría para que esta determine "qué tipo de protocolos deben usar los funcionarios del Estado en la entrega de subsidios, resguardando los derechos".
“En la crisis sanitaria más dura del último siglo, el Gobierno de Sebastián Piñera está preocupado de como aparecer entregando las cajas, de sacar las mejores fotos para las redes sociales, en vez de resolver realmente el problema del hambre y la cesantía”, señaló el senador.
