Editorial: Sergio Muñoz y la tesis del empate
La ministra Ángela Vivanco fue expulsada de manera unánime de la Corte Suprema por socavar las bases de la institucionalidad, así lo argumentó el presidente del máximo tribunal del país, Ricardo Blanco.
Pero Vivanco es solo la arista más visible de un escándalo que remece y sigue remeciendo los cimientos del Poder Judicial. Junto con dos acusaciones constitucionales contra Vivanco, le sigue la acusación contra Jean Pierre Matus y Sergio Muñoz.
El primero por sus conversaciones con Hermosilla y por haber mentido públicamente, y Sergio Muñoz por supuestamente haber entregado información privilegiada de una causa a su hija -también jueza- que habría hecho negocios inmobiliarios.
A muchos llamó la atención la acusación contra Muñoz por su perfil. Muñoz es de Linares, estudió Derecho en la Universidad Católica de Valparaíso. Y contrario a lo que pasó con Vivanco y Matus, Muñoz es de carrera judicial y llegó a la Suprema, después de años que partieron como oficial segundo del Tercer Juzgado del Crimen de Valparaíso.
Puede que pocos se acuerden de esto, pero cuando Muñoz integraba la Corte de Apelaciones de Santiago fue noticia nacional investigando el caso Riggs. Nos referimos a la investigación por fraude al fisco, malversación de fondos y cohecho en contra de Augusto Pinochet. El ex-dictador y senador vitalicio prestó declaración de manera voluntaria, puesto que su fuero como ex-presidente le permitía eludir el interrogatorio. El procedimiento se hizo en el domicilio de Pinochet y claramente está en la historia judicial de nuestro país.
Después de este procedimiento el Presidente de la República, Ricardo Lagos, lo nominó para que integrara el máximo tribunal del país, cuestión que ocurre desde el 2005, de hecho, fue su presidente el año 2013.
Esta editorial la titulamos con la tesis del empate ¿Dónde está el empate en toda esta situación? En el Congreso Nacional, evidentemente.
Para entender bien esto definiremos a Vivanco como una ministra de derecha, en su juventud estuvo asociada a un partido de centro derecha (UCC) y fue designada por un mandatario de derecha y ahora Muñoz tras perseguir judicialmente a Pinochet ¿Podemos decir que es de izquierda?, no lo conocemos tanto, pero estamos seguros de que así es como entienden este asunto en el Congreso.
Entonces probablemente muchos hoy estén pensando que, así como se expulsó del Poder Judicial a una ministra de derecha ahora sería bueno expulsar un ministro de izquierda y mantener los equilibrios.
Si así van a votar la acusación constitucional, de esta forma, estaríamos en un escenario lamentable. En rigor estos asuntos de derecha e izquierda debieran estar ajenos a los quehaceres judiciales, pero pedir eso a estas alturas puede ser una utopía.
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