Editorial: No hay que ideologizar el fin al CAE
En un discurso de 11 minutos y en cadena nacional el Presidente de la República Gabriel Boric dio el puntapié inicial para terminar con el CAE o Crédito con Aval del Estado. Es un puntapié inicial pues lo que ha hecho es presentar un proyecto de ley que ingresa a trámite regular en el Congreso, por lo tanto, en rigor sabemos cómo entra el proyecto, pero no como va a salir finalmente.
Con esto el mandatario cumple en parte una de sus promesas presidenciales y decimos en parte pues la promesa era más amplia. En rigor Gabriel Boric cuando era candidato en su programa de gobierno dijo "proponemos la condonación universal de las deudas educativas a través de un esquema de pagos a largo plazo por parte del Estado, donde la gradualidad sea soportada por las instituciones financieras y no por las personas endeudadas. Pondremos fin al CAE y crearemos un nuevo sistema único de créditos que será transitorio, hasta alcanzar la gratuidad universal. Será público, solidario, sin interés, sin participación de los bancos y no reproducirá los abusos del CAE”.
El proyecto de ley presentado tiene 3 patas: Condonar parte de las deudas educativas en base a criterios de justicia y mérito, reorganizar la deuda en términos razonables para quienes aún deban y reemplazar el CAE por un nuevo instrumento de Financiamiento Público para la Educación Superior llamado FES.
Un día posterior a la cadena nacional el Ministro de Educación Nicolás Cataldo salió a detallar el proyecto y conocimos por ejemplo que quienes terminaron de pagar el CAE en tiempo y forma recibirán beneficios tributarios y que además esta ley incorpora a todos las personas que se endeudaron para estudiar, es decir si tu estudiaste con Fondo Solidario o incluso con Corfo también podrás ingresar al Plan de Reorganización y Condonación de Deudas Educativas.
“El Estado subsanará parte de la deuda de todos los estudiantes con CAE y del resto de instrumentos de crédito existentes”, aseguraron desde el ejecutivo.
El fin al CAE es una buena noticia, claro algunos hubiesen querido que se cumpliera la promesa inicial de la condonación total, universal, pero la realidad se impone porfiadamente. El fin al CAE es una buena noticia! y sería bueno apoyarla y no torpedearla por la evidente ideologización del tema Educación. Tras el anuncio presidencial de inmediato escuchamos críticas o más bien dudas sobre lo que deberá desembolsar el Estado de Chile de su presupuesto y sobre el momento que se presenta (a solo un par de semanas de un proceso electoral).
Por 18 años cientos de miles de jóvenes profesionales y sus familias han hecho un esfuerzo gigantesco para algo que debiera ser un derecho de cualquier chileno: tener la posibilidad de estudiar una carrera de educación superior si es que así lo quiere.
Se han endeudado y muchos de ellos probablemente no han podido consolidar sus proyectos de vida precisamente por las deudas que adquirieron con los bancos para poder educarse. Por eso este tema no se debiera ideologizar, lo que no significa que no pueda haber diferencias técnicas en el proyecto de ley y que se puedan hacer mejoras a la iniciativa.
Lo que no debiera pasar es que se rechace o se torpedee sólo por el hecho que lo presenta un presidente de izquierda, eso sería darles la espalda a miles de jóvenes profesionales que por años han esperado este momento.
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