Un íntimo rincón sureño dentro del Gran Concepción: La historia familiar detrás de populares cabañas y piscinas
En medio de una frondosa vegetación se levanta Ainahue Club de Campo, sitio turístico que ofrece cabañas, piscinas temperadas y un restaurante a 30 minutos de distancia de Concepción. Desde su entrada por Hualqui que recorre la ribera del Biobío, este punto destaca por su cúpula de grandes ventanales que mira a una robusta zona recreativa.
En los 90s, Enrique Netz y Filadelfia Vollrath llegaron a la Quinta El Laurel con el sueño de instalar su hogar familiar, construyendo una piscina que, por el boca a boca, se popularizó entre el público. Esto motivó la creación de un pequeño centro, que desde su lanzamiento en 1996, creció lentamente junto a la comunidad hualquina.
"Al principio no contábamos con los recursos, así que a través del tiempo hemos ido sumando cosas", indicó la administradora Karina Netz. Pero se aseguraron de mantener el paisaje sureño, "de no intervenirlo demasiado y tratar que fuera orgánica. Aprovechamos la sinuosidad del terreno y respetar los árboles antiguos", agregó.
De esta forma, Ainahue, que significa "lugar de descanso", se adaptó a la naturaleza, manteniendo una araucaria centenaria que cruza su construcción principal e incorporando escaleras en el pequeño cerro que la hospeda. "Toda la familia se implicó en el proyecto, fueron muchos años de invertir y reinvertir para llegar a lo que es ahora", enfatizó el administrador Germán Ortiz.
Tras casi 30 años de evolución, el club recibe a sus visitantes con múltiples cabañas, una zona de juegos, bancas de picnic y dos piscinas al aire libre con toboganes. En la cima de la cuesta, la antigua casa familiar ahora alberga el restaurante, salas de eventos y dos piscinas temperadas. Todos rodeados por ventanales que muestran "un entorno todavía campesino, con mucho verde para conectarse con la naturaleza", destacó Netz.
Las tres décadas de Ainahue en la comunidad Hualqui: Más que piscinas para el Gran Concepción
A tres kilómetros del centro de Hualqui, y alrededor de media hora del centro de Concepción, el club Ainahue no sólo es popular por sus piscinas y cabañas. En sus 28 años de historia, se integró como un agente importante en la oferta turística y cultura de la comuna.
"Yo la adopté como mi comuna, como mi terruño. Yo nací en Talcahuano, viví mi infancia en Concepción, pero cuando descubrí lo que era estar acá en Hualqui, siento que encontré mi lugar", expresó Karina.
Por un lado, valora la belleza del paisaje que encontraron en las cuatro hectáreas de terreno rural. La administradora admiró la capacidad de "respirar en un entorno de aire limpio, escuchar los pajaritos, ver tanto verde... Estar en un pueblo, la sensación de estar en un pueblo donde se vive a otra velocidad las cosas".
Para retribuir las virtudes de este escenario, constantemente incluyen las iniciativas locales, como la orfebrería de Joyas Con Memoria. Un negocio que, con una colección basada en la lozapenco, llegó a exhibirse en el GAM de Santiago, "es una historia riquísima, es fascinante", señaló Netz.
Aun existen desafíos, como mejoramiento en infraestructura vial y la conectividad de Hualqui con el resto del Gran Concepción, puntualizó Ortiz, pero sus piscinas y cabañas continúan siendo accesibles para la conurbación.
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