Tras recientes homicidios en Península Hualpén: Realizan mesa de seguridad para tomar medidas de prevención
La gestión del desastre se ha transformado en un factor clave al momento de enfrentar episodios de emergencia en el Biobío. Y por normativa, debe existir un Plan Regional de Emergencia.
Y durante este viernes, autoridades locales que participan en la gestión de riesgos y desastres participaron de la actualización del Plan Regional en el Biobío, que incluye los nuevos episodios que han ocurrido, como remociones en masa.
El director regional de Senapred, Alejandro Sandoval, especificó que “este es un proceso que demoró aproximadamente un año, nosotros teníamos un plan regional de emergencia aprobado desde el 2021, pero los nuevos formatos y metodología derivó a actualizaciones por los cambios de escenarios y esperamos publicarlo prontamente".
Dentro de este plan se determina cómo responderán a largo plazo los organismos del Estado ante contingencias y problemáticas ligadas a desastres que deban ser a afrontadas. Si bien se mantiene la estructura, se modifican y agregan amenazas.
“El plan de emergencia lo que hace es coordinar una adecuada respuesta ante alguna emergencia ya sea de origen antrópico o natural que pueda afectar a la Región, son coordinaciones del nivel regional, hay que recordar que las emergencias primero se abordan desde el nivel local y una vez que el nivel local se ha visto sobrepasado se activa el nivel regional”, indicó Sandoval.
Sandoval adelantó que “el 6 de septiembre a las 12 horas, se va a realizar un simulacro, por erupción del volcán Callaqui, en las comuna de Alto Biobío y Santa Bárbara. Ya que, este volcán, eventualmente podría afectar o tendría algún impacto en ambas comunas, por lo tanto, invitamos a la comunidad a que se mantenga informada”.
Prevención por incendios forestales y temporales
Otras emergencias ligadas a desastres que han afectado al Biobío en los últimos años han sido los incendios forestales y temporales en la región.
Ante esto, el director aseguró que el trabajo de prevención de incendios forestales se trabaja durante todo el año y es liderado por CONAF, en conjunto con otros 11 organismos del Estado.
“Tuvimos un número importante de incendios forestales, pero con una superficie mucho menor, no tuvimos viviendas destruidas en la temporada pasada en la Región del Biobío, creemos que fue por un compromiso de la comunidad, alertada por los desastres del año 2023, pero también por el compromiso que tomaron los municipios en su labor de gestión del riesgo de desastres”, sostuvo.
En relación con los temporales del 2024 y los vientos que afectaron a la región, el director aseguró que los vientos no fueron excepcionalmente fuertes, “lo que pasa es que lamentablemente nuestra infraestructura está siendo poco resiliente”.
En palabras de la delegada presidencial del Biobío, Daniela Dresdner, en este nuevo plan de emergencia se “incorporaron nuevos potenciales riesgos para la zona”.
Anexado a riegos de tsunami, volcanes, incendios forestales y temporales, surgieron problemáticas nuevas tales como los riesgos hidrometeorológicos, el transporte de sustancias peligrosas, entre otras.
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