Reveló la desgarradora reacción de su madre Claudia: El crudo relato de Raffaella di Girolamo en querella contra Cristián Campos
La psicóloga Raffaella di Girolamo dio un crudo relato en medio de la investigación que se realiza tras la querella que presentó contra Cristián Campos. Contó que cuando era menor la indujo a beber alcohol y además, que fue su madre, Claudia di Girolamo, quien lo encontró desnudo en la cama de su hija.
En su declaración, Raffaella rememoró episodios de su adolescencia, que involucran al actor. "Tenía alrededor de 16-17 años, en esa época era cotidiano que Cristián me llevara al (restaurant) Tip y Tap. Íbamos a comer los dos solos. A esas alturas, Cristián ya me había inducido a beber alcohol, por lo que las comidas estaban siempre acompañadas de un trago de vodka”, dijo.
Incluso, reveló que el actor le contaba las situaciones complejas que vivía con su madre Claudia. "Lo más incómodo era que me decía que ni sexualidad tenían", detallando además que el actor la llevaba a comprar ropa interior y él elegía la ropa, que en su mayoría era con encaje o transparentes, consignó T13.
"No recuerdo bien el nombre de la tienda. En ese lugar, él elegía ropa, sostenes, calzones, siempre con encaje, transparentes. Se podría decir (que) muy sexies, no ropa interior para el día a día y me hacía probármelos en la tienda y una vez que yo tenía la ropa puesta, abría la cortina y me miraba desde afuera", relató Raffaella.
Ella además contó que pese a que dormía con la puerta cerrada y con pestillo, Cristián Campos ingresaba a su habitación por la noche. "Cristián entraba a mi pieza en la noche. Se daba cuenta que yo estaba despierta. No recuerdo qué me decía exactamente, era algo como que era tarde y había que dormirse", dijo.
"Como ocurrió más de una vez que me vio despierta. Cristián mostró preocupación y me dijo que a veces tomaba unos remedios naturales que lo ayudaban a dormir y me los empezó a dar", agregó.
Sin embargo, fue cuando tenía 17 años cuando su mamá le prohibió ir al colegio y le ordenó a quien trabajaba en el hogar que no la dejara salir. Raffaella, pese a ello, aceptó una invitación hecha por Campos a tomar un café. Ahí él le contó que tuvo una discusión con Claudia Di Girolamo.
¿La razón? Según su testimonio, "ella estaba molesta por nuestra amistad y nuestra cercanía, por lo que teníamos que tomar distancia. No recuerdo si yo le pregunté algo, tampoco cómo nos fuimos y cómo llegamos a la casa, sólo que después yo estaba en mi pieza nerviosa, preocupada y confundida".
"Mi mamá llegó después de su jornada laboral, abrió la puerta de mi pieza, entró muy rápido se me acercó desesperada y me dijo: “¿Qué pasó? ¿Te hizo algo? ¿Qué pasó? ¿Qué te hizo?”, sostuvo.
La desgarradora reacción de Claudia Di Girolamo: Sospechaba de Cristián Campos
En su momento, ella no entendió la reacción, pero cuando le contó lo ocurrido, Claudia le confesó que ella encontró a Cristián Campos desnudo en su cama. "Después me explicó que Cristián estaba acostado desnudo a mi lado en mi cama y que en ese momento ella le habló y que trató de despertarme y que me habló, pero yo miré a Cristián, hice un gesto como de asco y seguí durmiendo", relató.
Precisando que la actriz también le contó "que le llamó la atención que la ropa de Cristián estaba doblada en la silla que estaba en la pieza".
¿Cuándo le dijo Raffaella a su familia lo que sucedió? Fue en una noche de Navidad. Con una carta le contó a su familia (sus hermanos Pedro y Antonio Campos se enteraron después). A Claudia se la entregó, pero le dijo que después hablarían.
“Le pasé la carta, yo le pedí que leyera la carta entera y que después hablábamos. Ella comenzó a leer la carta entera, yo estaba con una botella de agua y tomaba mucha agua. Trataba de mirarla muy poco, pero a medida que leía la carta, yo notaba en ella, en su cara, que se estaba enojando", dijo.
Si bien en la misiva no estaba el nombre del actor, sí relataba lo sucedido. Según lo señalado por Raffaella, Claudia cuando terminó de leer la carta, "me mira y me dice ‘fue Cristián’, y yo le respondí que sí". Tras ello, se fundieron en un brazo, que derivó también en un llanto.