Sujeto robó mercadería destinada para alimentar a adultos mayores de San Felipe en situación de calle
Un sujeto robó mercadería destinada para alimentar a adultos mayores en situación de calle y abandono, en San Felipe, Región de Valparaíso. Ocurrió en dependencias de un comedor que solía ser el Hogar de Cristo. Actualmente, dos voluntarias son las que prestan ayuda para darles comida a 28 ancianos.
De acuerdo a los antecedentes, el lugar ya ha sufrido tres robos y no sólo se llevaron mercadería, sino que también se robaron una estufa y un carro de verduras.
Una de las voluntarias, que reservó su identidad, indicó al medio El Trabajo, que están "muy apenadas porque atendemos a 28 abuelitos que viven en situación de calle o abandono. Nosotras somos voluntarias y ya nos han robado tres veces".
Incluso contó que en Semana Santa también entraron a robar al recinto. "Nos abastece el Hospital San Camilo, estamos en las dependencias del arzobispado, ex Hogar de Cristo. La verdad es que nos dejaron a brazos cruzados porque esta vez se llevaron todo", sostuvo.
La mercadería les había llegado recién y estaba destinada a que fuera alimento para los adultos mayores en situación de calle y abandono. "Nos llevaron todo: leche, azúcar, aceite, huevos, todo con lo que alimentamos a nuestros abuelitos. Estamos muy tristes porque, bueno, los delincuentes no piensan en nada, pero nosotros estamos con el alma muy destrozada", contó la mujer.
No solo se llevaron la mercadería: También robaron una estufa en San Felipe
No solo se llevaron comida, sino que también una estufa y un triciclo de verduras que un hombre usaba para vender. "Ella (segunda voluntaria) trajo una estufa y también se la robaron, el arzobispado había arreglado y le pusieron más chapas a la puerta, pero igual entraron y se robaron todo. No sé con qué fuerza rompieron la puerta", dijo.
Precisando que "un usuario de nosotros que vende verduritas en un triciclo lo había dejado acá porque no tenía dónde dejarlo, y se lo robaron, el tipo cargó el triciclo e hizo como tres viajes".
El hecho generó una profunda pena en las voluntarias, ya que era el alimento que habían destinado para el día. La voluntaria manifestó que "todo esto es voluntario, cómo seguimos, mañana qué hacemos, hoy saqué plata de mi bolsillo como lo hemos hecho muchas veces cuando no tenemos para tenerle almuerzo para hoy".
"Para mañana no sabemos, pero cómo se los decimos a ellos, si ellos no tienen casa, nos da mucha pena, mucha pena", sentenció la mujer.
