Con el avance de los contagios, las medidas sanitarias previo al feriado de Semana Santa se reforzaron. Y por ello, cientos de autos esperan horas para pasar por el control sanitario que se estableció en Paine.
En medio de ese confluencia de autos, Carlos Contreras vio una oportunidad y se instaló a vender charqui y maní, paseando entre los vehículos para ofrecer sus productos. Esto a pleno sol y durante horas.
Sin embargo, Carlos no trabaja solo. En conversación con 24 horas, declaró que en días de alta afluencia de vehículos viene su hijo de San Carlos, su nieto y también su hija.
En relación a esto último, señaló que entre los cuatro superan el millón y medio en ventas. Pero a pesar de su buena jornada, dice que no siempre ocurre: "ahora nos va bien pero después más adelante nos va súper mal, al frente vendemos 10 o 20 mil pesos diarios".
Para esta y otras informaciones, únete gratis a nuestro canal de Telegram haciendo click aquí.