El conflicto entre locatarios y vecinos que llevaría a levantar la “barrera sanitaria” de Lenga
Desde hace diez meses, una barrera instalada al ingreso de Lenga mantiene en conflicto a locatarios y vecinos de la caleta. El “puesto de control” se implementó en común acuerdo para proteger a la comunidad de los efectos de la pandemia por Covid-19.
Sin embargo, algunos administradores de restaurantes aseguraron que, actualmente, el cierre “no da para más” y que necesitan volver a atender a sus clientes bajo los estándares que establece la autoridad, para cuando Hualpén avance a la Fase 2.
Restaurantes
Joel Chaparro, administrador del restaurante “El Mono”, contó que “desde antes de esta última cuarentena, nos vimos complicados para poder trabajar con la gente que quería ingresar a la caleta. Muchos querían entrar y asegurarse de que le estaban comprando al restaurante al cual estaban habituados. Lo que buscan nuestros clientes, es comprar desde afuera del local, a través de una ventana. Pero la barrera no los deja entrar”.
Dicha barrera, explicó Chaparro, se instaló en marzo de 2020. En ese momento, la mayoría estuvo de acuerdo con su implementación. “No queríamos que el Covid-19 afectara a la caleta. Pensamos que sería por algunas semanas. Y cuando ya pudimos trabajar nuevamente, algunos vecinos se mostraron muy reticentes a levantar la barrera. Pero necesitamos abrir, tanto para nosotros como para nuestros trabajadores, que también son de acá. Ninguna autoridad ha venido y ha sido clara para decirnos si esa barrera se debe levantar o no”, añadió.
Llegada de carritos
Rubén Andrades, propietario del restaurante “Viejo Lobo de Mar”, manifestó que el “cierre” de Lenga generó duros estragos económicos para él y otros dueños de locales tradicionales. “Esta barrera nunca debió haber estado ahí. Las medidas las debe tomar el Ministerio de Salud. La Junta de Vecinos puso la barrera sin autorización. Lo único que ha hecho es daño, a las pymes gastronómicas. Nos coarta la libertad de trabajo”, indicó.
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Andrades agregó que algunas personas han implementado “carritos” que actualmente sí están atendiendo y vendiendo empanadas y otros productos. “Se transformó el comercio legalmente establecido en uno ambulante, en la vía pública a través de carros. Algunos arrendaron u otros compraron y no sabemos si están cumpliendo con las leyes tributarias que se nos exigen a nosotros. Ahora somos menos las pymes que queremos trabajar como corresponde, que quienes quieren seguir ejerciendo irregularmente, amparados en que la barrera protege del virus”, planteó el dueño del restaurante “Viejo Lobo de Mar”.
Añadió que “al final, la gente de Lenga está entrando y saliendo igual. No dejan entrar a clientes, pero sí a otros comerciantes, amigos o familia. La barrera no está cumpliendo ninguna protección para el Covid-19, porque no hay ningún protocolo detrás. Es un pedazo de fierro que suben para dejar pasar".
Versión de la junta de vecinos
Sabes.cl consultó a Susana Velázquez, presidenta de la Junta de Vecinos de Lenga, por la situación expuesta por parte de los locatarios. Al respecto, señaló que “la decisión de poner la barrera fue de toda la comunidad. Después hubo pequeños malos entendidos entre personas que querían trabajar y otras que no”. Aclaró que, si bien hubo conversaciones sobre levantar el cerco, nunca hubo una petición formal por parte de los locatarios.
Velázquez añadió que “en la última reunión que se tuvo, se decidió que la barrera iba a continuar por decisión de la mayoría, hasta que alguien nos dijera que se realmente no podía seguir y que los locales iban a poder abrir y la gente volver a trabajar. Pero eso nunca ha pasado. Ninguna autoridad ha venido a decirme que esto no puede continuar”.
Además, la presidenta de la Junta de Vecinos de Lenga aseguró que “durante las últimas tres semanas, no hay nadie en la barrera y no se le impide la entrada a nadie. La gente entra libremente por la playa y la avenida principal de lenga, siempre y cuando ande con su salvoconducto”.
Vecinos de Lenga levantarían la barrera
Frente a la consulta de qué pasará con la barrera al término del confinamiento para Hualpén, Velázquez señaló que “cuando termine la cuarentena, al menos la barrera desde ya yo creo que la tendríamos que sacar. Por el momento no hay nadie ahí. Anda súper poco público y cuando termine la cuarentena ya lo tenemos decidido, se va a sacar la barrera. Para evitar tantos conflictos o malos entendidos, como ha habido hasta el momento. Así cada quién se cuida como puede”.
Respecto al balance que hizo del “cierre” de Lenga, la dirigente vecinal sostuvo que “fue para que no se aglomerara tanta gente ya que la caleta es un polo turístico y gastronómico bien importante de la región”. Añadió que, a su juicio, el cerco “fue un aporte, aunque igual se ha contagiado gente. Tenemos algunas familias con Covid”.
Seremi de Economía por barrera de Lenga
Mauricio Gutiérrez, seremi de Economía de la Región del Biobío, se refirió a la problemática que denunciaron los dueños de restaurantes de Lenga. “Duele mucho la impotencia que tienen los locatarios, quienes llevan mucho tiempo cerrado y están viendo peligrar su negocio. Lenga y sus locales gastronómicos generaban muchos puestos de empleo. Ellos han sido un ejemplo nacional sobre cómo se ha integrado la pesca artesanal con la parte gastronómica”, sostuvo.
El seremi agregó que “falta un rol mediador de la municipalidad para poner de acuerdo a la junta de vecinos con los locatarios. No se trata de imponer por ley, falta conversar y llegar a un acuerdo. Esta gente ha sufrido mucho más que el promedio de lo que ha sufrido el rubro gastronómico en otras partes de Chile”.
Respecto al apoyo que se le está entregando a los locatarios, dijo que “a través de Corfo y Sercotec han obtenido subsidios, pero nunca será suficiente (…) no puede ser que exista una barrera que impida que ellos desarrollen su negocio”.
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