Carabinero imputado por disparos a menores en Hogar Macera de Talcahuano: "Temí por mi vida"
El carabinero imputado por disparos contra menores de edad en el Hogar Macera, centro colaborador del Sename en Talcahuano, se encuentra actualmente bajo arresto domiciliario. Desde allí, el sargento John Mongrave contó su versión de los hechos.
Cabe recordar que e uniformado con 19 años de servicio, formalizado por apremios ilegítimos, sostuvo que el día en el que ocurrieron los hechos, se hallaba realizando un recorrido en bicicleta por el plan cuadrante. En entrevista con La Tercera PM, manifestó que cuando se encontraba junto a su compañero, recibieron un llamado del Samu. Indicó que se pidió apoyo para “atender a un joven con problemas de descompensación al interior del hogar”.
Manifestó que “el llamado no era nada de extraño. Es muy común que el Samu llame a Carabineros en esos casos”. Del mismo modo, indicó conocer a los menores del recinto del Sename, ya que solían ir al centro Carlos Macera. Aseguró que ese mismo día habían quedado de ir a arreglar bicicletas en dicho centro.
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“Conocía personalmente a muchos de los niños y adolescentes, y en general, especialmente los más pequeños, nos quieren mucho“, indicó el imputado.
El sargento dijo que llegaron en una actitud “totalmente amistosa”. Señaló que, cuando se retiraban, un grupo de adolescentes los comenzó a agredir con patadas, piedras y palos. Argumentó que su casco quedó partido en dos por los golpes que habría recibido.
“Luego, cuando llegaron refuerzos, agredieron a otro compañero con tanta agresividad que le terminaron quebrando el brazo a palos”, sostuvo. Añadió que “me han tocado muchas situaciones complicadas, pero nunca nada como esto”.
Relató que, en ese momento, “yo temí por mi vida y creo que estoy vivo solo gracias a mi contextura física, que me permitió correr y correr y volver a correr entre uno y otro golpe. Doy gracias por estar con vida y no haber sido el mártir 1.222 de Carabineros”.
Mongrave indicó que a raíz de este suceso, ha sentido crisis de pánico y que actualmente recibe tratamiento psicológico. También dijo que está tomando pastillas para dormir.
“Me han contactado mis compañeros, las juntas de vecinos, colegios, gente de las poblaciones, del comercio establecido y también los comerciantes ambulantes”, señaló.
El sargento no se refirió a la salida del general Rozas tras estos hechos. Sin embargo, sí señaló que él a sus compañeros “siempre” les decía: “Con la verdad, ante todo, aunque te cueste tu trabajo. Con la verdad por delante siempre van a creer en ti, sin omitir ni inventar nada”. Además, agradeció el apoyo del general director, Ricardo Yáñez, quien lo visitó personalmente
