Comunidad educativa de escuela quemada en Tirúa se une y ellos mismos parten la reconstrucción
La comunidad educativa de la escuela F820 Ana Molina de Tranaquepe en Tirúa se unió para comenzar inmediatamente con la reconstrucción.
El inmueble quedó reducido a cenizas por un presunto ataque incendiario.
En coordinación con el municipio de Tirúa se acordó iniciar una primera etapa de remoción de escombros, la que se concretó durante el fin de semana.
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Gladys Lincopán, apoderada del establecimiento, señaló que “para nosotros significó harto que hayan quemado esta escuelita, porque aquí nosotros encontramos una familia más. La verdad nos vamos a parar, porque como ven, estamos trabajando con mucha energía, para poder tener nuestra escuelita de nuevo. Aquí uno entraba y se le demostraba el cariño”
Asimismo, Patricia Durán, profesora básica de primer ciclo, recordó emocionada que “me inicié en esta escuela en el año 80, llegué a Tirúa y no me moví más. Cumplí 40 años aquí, me cuesta un poquito hablar de todo esto que ha pasado, me emociono, son muchos recuerdos que tengo”.
“A pesar de mi pena, siento una satisfacción muy grande de haber enseñado a muchas generaciones y eso es lo que me da fuerza hoy día de tomar la carretilla, la pala y sacar estos escombros que me traen muchos recuerdos”, agregó.
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Julián Galdames, encargado del transporte escolar del recinto, dijo que “estamos ayudando a limpiar un poco, con la causa, tratando de aportar lo que más se pueda. Da pena ver todo esto en escombros, pero hay que apoyar”.
El objetivo es tener todo limpio rápidamente para disponer de la primera etapa, la instalación de módulos que permitan volver a clases cuando las condiciones sanitarias lo permitan.
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