“Crisis de la Humanidad” La gran oportunidad

Actualmente frente a la situación que estamos viviendo a nivel Mundial, quizás sería necesario reflexionar que estamos enfrentado no solo una pandemia, una crisis económica o una crisis social, sino más bien para mi gusto, una “Crisis de la Humanidad”.

He aquí, la gran oportunidad que se presenta en cuanto a salir de esto fortalecidos y con el mayor y mejor de los aprendizajes en todo sentido.

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Es así que una de las preocupaciones que se observa, esta en torno a la incertidumbre de cómo esta situación afectará a la economía de cada país y mayormente aún, a la de cada familia. Si bien autores íconos de teorías relacionadas, dicen que el Mundo se mueve en torno al funcionamiento de los mercados y los intereses que existen en torno a ellos, lo que se puede ver reflejado en Modelos económicos que han ido variando según las necesidades económicas/sociales e ideologías.

Cabe destacar, que los Mercados los componen personas, las cuales más que un agente económico en sí mismo, constituyen un ser que según su nivel de conciencia, actúa en torno a expectativas y estructuras en relación al ambiente que se enfrenta … ese creo sin duda es el mayor desafío que enfrentan los análisis de conductas de Mercados.

He aquí el llamado a que cada persona no solo debe estar cada vez más informada y preparada, sino también más conectada con la realidad propia y la de los demás que lo rodean, en pro tomar las mejores decisiones para avanzar como humanidad al encuentro de un bienestar colectivo, y dentro de ello, un bienestar económico y social en general.

En esto, debemos considerar que la información que en muchos momentos se ve presente para la toma de decisiones, puede ser asimétrica, no obstante, si existe una búsqueda propia, las personas pueden conectar con lo esencial para actuar de forma tal que afecten positivamente sus vidas y las de otros, y bajo el contexto de análisis económico, decisiones que impacten la calidad de vida de las personas entre otras cosas.

Me parece interesante recordar la contribución de autores que han recolectado información y datos objetivos como el estado socioeconómico, años de escolaridad o tipo de vivienda, no obstante, se ha demostrado que estos indicadores económicos han sido insuficientes para estimar conductas de las personas en cuanto a decisiones económicas entre otras cosas, dado que sólo son capaces de explicar una parte de ellas.

Es por ello que, a estas investigaciones, se suma la de psicólogos que han planteado que mediciones subjetivas podrían dar cuenta con mayor certeza del actuar de las personas para tomar decisiones, como lo son la felicidad y la satisfacción, conceptos que hoy en día son temas en cuestionamiento y que por ende, son motivo de reflexión de las personas a nivel mundial.

Dado lo anterior, la mayor reflexión está en que la discusión en torno a la toma de decisiones económicas, debería estar sentada en lo que respecta a la evolución de los valores humanos aplicados, tanto a los negocios como a la sociedad, reforzando la idea que cada persona es rica en sí misma, dado su potencial y nivel de conciencia, y que ello bien desarrollado sin duda genera impactos positivos ya sea para su país, su organización, su familia o para sí mismo.

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