La nebulosa tras las tres desapariciones que remecen a Concepción
A consecuencia de la desaparición de Tamara Zurita en Chiguayante se abrió nuevamente una gran incertidumbre referente al destino de las personas que en el último tiempo están desaparecidas y nada se conoce de sus paraderos.
"Coto": 4 meses perdido en CañeteEl que lleva meses sin ser encontrado a pesar de una serie de operativos de rastreo y búsqueda en Cañete es Hector Torres (32), alías “Coto”, el que su familia lucha por mantener vigente en la opinión pública con distintas campañas, pero nada ha permitido dar con su paredero.
Su desaparición ocurrió el pasado 22 de mayo. De él solo hay un registro de una cámara de seguridad que lo grabó caminando por una céntrica calle de Cañete en la provincia de Arauco. Él sufre de epilepsia y según reveló su familia, tiene problemas de aprendizaje por lo que tomaba medicamentos.
Salió con maleta y ropa nueva de Talcahuano
El segundo caso en orden cronológico es el de Yaqueline Avaria (43), vecina del cerro Centinela de Talcahuano y que abandonó su hogar, además del tratamiento antidepresivo que se le recetó. La mañana del domingo recién pasado, salió y no volvió a casa.
Betzabé Avaria, su hermana dijo que “toma medicamentos y los dejó en la casa. Salió el domingo con una maleta, una mochila y ropa nueva. Ningún familiar o conocido cercano sabe de ella, tampoco responde los dos celulares con los que anda. Estamos muy angustiados, sobre todo mi mamá”.
Al momento se desconoce de operativos que rastreen su huella, siendo solo su familia la que lidera la búsqueda en distintos sectores del puerto, ya que también cuentan con una grabación que la sitúa cerca de la segunda comisaría de carabineros de Talcahuano.
Tamara y el enigma
El último caso y que más conmociona es el de Tamara Zurita, joven de 21 años, ex estudiante de preparación física de la Universidad Santo Tomás, quien tras un paseo al sector parque de canchas en los Altos de Chiguayante, presuntamente para leer un libro, no volvió a aparecer.
En la nebulosa aún se encuentran los audios de whatsapp que se liberaron y que tenía como destinatario su amigo Nicolás, a quien llorando le recriminaba que no llegó al lugar de encuentro, ya que la cita nunca se concretó.
En los ultimos días, paralelo a la búsqueda en el Río Biobío, la policía confirmó que enre las hipótesis está una arista sentimental la que ha incluído diligencias con acádemicos de la casa de estudios en la que estaba.
Tres casos, tres historias que siguen sin una respuesta ante la angustia de sus familias.