Ex carabineros a la cárcel y militares en libertad vigilada por asesinato de 18 campesinos en Mulchén
11 ex militares y carabineros fueron condenados con distinas penas por su responsabilidad y participación en el denominado caso Retiro de Televisores, arista Mulchén, en el que 18 campesinos fueron ejecutados por la Dictadura Militar en 1973.
Los carabineros en retiro Jacob Ortiz, Juan Higueras, Osvaldo Díaz y Héctor Guzmán deberán cumplir 10 años de cárcel efectiva por 12 homicidios calificados, 5 años más por secuestro calificado y 300 días más inhumación ilegal, sin derecho a beneficios.
En cambio los militares José Iturriaga, Jaime Miller, Julio Fuentes, Luis Palacios, Juan Balboa, Jaime García y Julio Reyes fueron condenados por encubrimiento a 3 años y exhumación ilegal a 541 dias, sin embargo cumplirán con libertad vigilada.
“Ellos fueron sentenciados por delitos de homicidio calificado, secuestro calificado e inhumación ilegal -carabineros-, en cambio los militares, ellos participaron en un hecho el año 79, fue por el llamado retiro de televisores en que concurrieron al lugar de los hechos, desenterraron restos óseos de estas personas ejecutadas, entonces la pena de ellos es de encubridores, porque no fueron ni autores ni cómplices”, explicó el ministro en visita de la Corte de Apelaciones de Concepción, Carlos Aldana.
Una decisión que dejó insatisfechos a los familiares de la víctimas. “No estamos conformes, porque considero que los años que les han dado son pocos con respecto a la cantidad de víctimas que fueron asesinadas. Ellos eran de inteligencia del Ejército y ellos trataron además de encubrir, ocultar todo lo horroroso de los asesinatos” dijo su vocera Marina Rubilar.
La acción a seguir será recurrir de apelación al fallo. “Hemos conversado con los familiares y obviamente hay que analizar el fallo en su totalidad y ver la interposición de un recurso de apelación que permita a la ilustrísima Corte de Apelaciones revocar el fallo y que se enmiende conforme a derecho”, señaló la abogada querellante Patricia Parra.
La ejecución de los campesinos ocurre en octubre de 1973 por parte de carabineros. En 1979 son exhumados ilegalmente por el Ejército y llevados hasta el regimiento de Los Ángeles donde los restos fueron incinerados y hechos desaparecer, según dicta un fallo de la Corte Suprema en 2009, por orden expresa de Augusto Pinochet.