El mercado muestra una expansión marcada por precios más accesibles, regulaciones más estrictas y la búsqueda de equipos que respondan a estilos de vida modernos. Por ejemplo, la congeladora vertical se ha convertido en una alternativa relevante en los hogares chilenos debido a su formato compacto y de fácil organización responde a la necesidad de optimizar espacios reducidos sin sacrificar capacidad.
El informe estratégico sobre refrigeración en Chile indica que estos modelos han ganado protagonismo gracias a la incorporación de tecnologías como el sistema No Frost y compresores Inverter, que permiten un menor consumo energético y reducen la necesidad de mantenimiento. Además, la modularidad ha emergido como una innovación clave, ya que equipos como el Fensa FTI4S pueden unirse a un refrigerador de la misma línea para crear un conjunto unificado de más de 600 litros de capacidad, compitiendo directamente con los modelos tradicionales.
En el caso del refrigerador side by side, la preferencia del consumidor chileno se ha orientado hacia un electrodoméstico de gran capacidad y con un diseño que se integra a cocinas abiertas y minimalistas. Esta categoría se ha consolidado como el segmento premium gracias a innovaciones como la conectividad Wi-Fi, el monitoreo inteligente de alimentos mediante inteligencia artificial y la incorporación de compresores Inverter que pueden generar ahorros de hasta un 40% en consumo energético. De hecho, los acabados planos y minimalistas en acero inoxidable o negro refuerzan además su carácter aspiracional, respondiendo a las tendencias de diseño de cocinas modernas.
Un factor clave para la industria es la nueva normativa de eficiencia energética que comenzó a regir en junio de 2025. Según el Ministerio de Energía, los refrigeradores y congeladores deben cumplir ahora con un Índice de Eficiencia Energética (IEE) máximo de 145, lo que obliga a los fabricantes a incorporar tecnologías más sostenibles. El cronograma de actualización prevé estándares aún más estrictos hacia 2034, con un IEE máximo de 100, anticipando una transformación estructural del mercado.
Este marco regulatorio ha acelerado la adopción de motores Inverter, sistemas de gestión inteligente del consumo y funciones avanzadas como el modo AI Energy, que optimiza el rendimiento según los hábitos de uso. De esta forma, la regulación no solo actúa como una barrera de entrada, sino también como un motor de innovación que beneficia al consumidor con productos más duraderos y eficientes.
La elección entre un sistema de refrigeración depende del estilo de vida y del espacio en cada hogar. Se puede optar por eficiencia, practicidad y flexibilidad de instalación, o elegir uno que combine alta capacidad con integración a un ecosistema de hogar inteligente.
De acuerdo con el Centro Nacional de Comercio (CNC), las importaciones de línea blanca crecieron un 9,1% en el primer trimestre de 2025, impulsadas por un entorno de precios internacionales más bajos. Esto ha democratizado el acceso a electrodomésticos que antes se consideraban de lujo, ampliando las posibilidades para consumidores de distintos segmentos.
En 2025, la refrigeración en Chile ya no se define únicamente por el tamaño o el precio inicial, sino por la capacidad de los equipos para ofrecer ahorro energético, integración tecnológica y adaptabilidad a distintos espacios del hogar.