Nuevos antecedentes revelan que el presunto responsable de la muerte de la tecnóloga médica Macarena Yévenes Venegas, ocurrida el pasado 30 de mayo en la autopista entre Concepción y Talcahuano, circulaba con 2,26 gramos de alcohol por litro de sangre al momento del accidente.

La cifra, según lo indicado por el informe de alcoholemia recibido el 6 de junio, confirma un estado avanzado de ebriedad, clave en la investigación judicial en curso.

El imputado, identificado como Oliver Contreras Ramírez, cruzó el bandejón central de la ruta 154 e impactó a alta velocidad el vehículo de la víctima, provocando su muerte inmediata. El informe de la SIAT de Carabineros determinó que el conductor actuó en un “estado de intemperancia alcohólica no determinado” al momento del choque, lo que ahora se corrobora con el resultado pericial.

Fiscalía pide prisión preventiva por peligro para la sociedad

Durante la audiencia de formalización, la Fiscalía de Talcahuano solicitó prisión preventiva para Contreras, alegando que su libertad constituye un peligro para la sociedad. El fiscal argumentó que la gravedad del hecho, la alta velocidad y el nivel de alcohol en sangre reflejan una conducta dolosa. “Conducía con tal energía que traspasó un bandejón central y colisionó mortalmente a una víctima inocente”, detalló el recurso de apelación.

Pese a estos argumentos, el Juzgado de Garantía de Talcahuano decretó medidas cautelares menos gravosas: arresto domiciliario total, firma mensual, arraigo nacional y suspensión de la licencia de conducir, descartando inicialmente la prisión preventiva por falta de evidencia técnica suficiente al momento de la primera audiencia.

Familia de Macarena Yévenes exige justicia

Los padres de Macarena Yévenes, representados por el abogado Juan Fernando Silva, presentaron una querella criminal por homicidio con dolo eventual. En el escrito se enfatiza que el imputado contaba con antecedentes por conducción bajo la influencia del alcohol y exceso de velocidad, y que su condición de funcionario municipal agrava su responsabilidad. “Este patrón de conducta temeraria exige una sanción penal ejemplar”, sostiene la causa.

La familia solicita una pena de 15 años de presidio efectivo y recalca que no se trata de un accidente aislado, sino de una decisión voluntaria de conducir en un estado que evidenciaba completo desprecio por la vida ajena. La querella apunta a recalificar el caso desde la Ley de Tránsito a un delito doloso del Código Penal.

La Fiscalía insistirá ante la Corte de Apelaciones para revocar las medidas cautelares y decretar prisión preventiva, apoyada ahora por el resultado de alcoholemia. La muerte de Macarena provocó gran conmoción en la comunidad que aún días después de su muerte sigue llevando flores al lugar del accidente.

Revisa más noticias de la Región del Biobío. Síguenos en Facebook e Instagram para ver fotografías con datos de contingencia nacional y del Gran Concepción.