Un reciente estudio realizado por la Escuela del Clima de la Universidad de Columbia desafía la tradicional explicación sobre la extinción de los dinosaurios, quienes ya sufrían los efectos de un evento catastrófico en el periodo Cretácico llamado Invierno Volcánico.

La investigación identificó al fenómeno climático como un factor determinante en la desaparición progresiva de diversas especies. Durante décadas, los científicos expertos atribuyeron la extinción masiva de estos animales al impacto de un asteroide. 

Sin embargo, el nuevo estudio sugiere que una catástrofe global ya había comenzado millones de años antes, en el transcurso de la fragmentación del supercontinente Pangea, en el periodo Triásico.

El congelamiento provocó parte de la extinción de los dinosaurios

Según los investigadores, gigantescas erupciones volcánicas liberan enormes cantidades de dióxido de azufre a la atmósfera. Este gas, al combinarse con el vapor de agua, formó aerosoles de sulfato capaces de bloquear la luz solar.

El resultado de esto fue un prolongado enfriamiento global que duró aproximadamente un siglo. A causa de este suceso, se redujeron de forma drástica las temperaturas, afectando a la fotosíntesis y alterando los ecosistemas terrestres y marinos.

De esta forma, el estudio destaca que la extinción de los dinosaurios fue un proceso prolongado y multifactorial, siendo el impacto del asteroide en el Cretácico lo que terminó por eliminar a estas criaturas de la faz de la tierra.

La actividad volcánica modificó los ecosistemas, transformó la vegetación, eliminó hábitats y redujo las fuentes de alimento. Juntos estos eventos delinearon el fin de una era y el inicio de una nueva etapa en la historia de la vida en el planeta, sin la presencia de los dinosaurios, sólo sus restos fósiles.

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