Sin sueldos ni cotizaciones de mayo se quedaron los trabajadores del Café BAC, que contaba con sedes en Concepción y Talcahuano, luego que empezara un proceso de liquidación concursal. En una declaración compartida con SABES los afectados lamentaron la “indefensión económica” que enfrentan. Tras esto, los dueños Pamela Espinoza y Nicolás Gilbert emitieron un comunicado […]
Sin sueldos ni cotizaciones de mayo se quedaron los trabajadores del Café BAC, que contaba con sedes en Concepción y Talcahuano, luego que empezara un proceso de liquidación concursal. En una declaración compartida con SABES los afectados lamentaron la "indefensión económica" que enfrentan.
Tras esto, los dueños Pamela Espinoza y Nicolás Gilbert emitieron un comunicado explicando el cierre. "Se produce a raíz de una crisis real y sostenida, que viene afectando profundamente al rubro desde hace varios años. Hemos enfrentado pérdidas desde el estallido social, luego con la pandemia, y ahora con un escenario económico nacional que ha golpeado con fuerza a muchas pequeñas y medianas empresas, y a nosotros con especial intensidad", leyó el documento.
Hace 15 años la cafetería inauguró su primer local, antes de mudarse frente al Parque Ecuador. A pesar de su reconocimiento en el Gran Concepción, "hace años que los dueños no percibimos utilidades", aseguraron. Durante el último tiempo "las obligaciones superaron con creces los ingresos" agregaron.
Aun así, afirmaron que siempre pagaron los sueldos, "todo lo que se recaudaba iba directamente al cumplimiento de nuestras obligaciones con los trabajadores, incluidas, por supuesto, sus cotizaciones previsionales". Hasta mayo, mes en que los empleados trabajaron sin percibir remuneración, enterándose el 1 de junio del cierre.
A raíz de esto, "debemos reconocer que hoy no tenemos los recursos para continuar con el
negocio, y lo más doloroso, para dar respuesta inmediata al pago de las remuneraciones del
último mes trabajado", comentaron. Además, esperan que "a través de liquidación de los bienes del negocio, se pueda pagar lo que corresponde, especialmente a quienes trabajaron con nosotros hasta el final". Eso sí, el café BAC precisó que no será inmediato.
En respuesta al comunicado de sus antiguos jefes, el trabajador Carlos Fuentes señaló a este medio que "estamos insatisfechos con la declaración pública de nuestro empleados, porque ni siquiera llegó a nuestras manos, nos tuvimos que enterar por terceros. Se expresa en la carta que el dinero de nuestros sueldos no está porque debió pagar otras deudas, pero ¿cuáles deudas? Nosotros tenemos el respaldo de que no pagó arriendos ni proveedores ni cotizaciones. Entonces ¿dónde está ese dinero?".
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