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El próximo 5 de septiembre se estrenará en todo el mundo la cuarta entrega de El Conjuro, una producción que en esta ocasión adaptará una compleja historia que enfrentó el conocido matrimonio de los Warren.

Lorraine y Ed Warren fueron un matrimonio de investigadores paranormales que atendían inquietantes fenómenos registrados en Estados Unidos. Según comentaron en alguna oportunidad ellos mismos, en total vieron más de 10 mil casos a lo largo y ancho de todo el país, siendo uno de ellos el de Amityville.

"Last Rites" o "últimos ritos" es el nombre otorgado a esta cuarta entrega de la saga, la cual podría ser la última película. Asimismo, este largometraje marca el regreso de la pareja de investigadores como protagonistas tras el estreno de la tercera parte en 2021. Si bien aparecieron al final de "La Monja", esto fue solo un "cameo".

La historia detrás de El Conjuro se sitúa en el año 1986 cuando ambos ya se encontraban retirados, pues solamente atendían consultas por fenómenos paranormales. Sin embargo, tuvieron que volver tras una petición realizada por la familia Smurl.

Todo se remonta al año 1974 cuando Jack y Janet Smurl se mudaron con sus cuatro hijas a una casa en West Pittston, Pensilvania. Con el paso de los días comenzaron a experimentar inquietantes fenómenos. Primero solo eran ruidos y olores sin explicación, los cuales se convirtieron en eventos más violentos.

Tal parece que una entidad sin forma física los estaba empujando, arañando y golpeando. Asimismo, la propia Janet aseguró que en más de una ocasión fue víctima de agresiones sexuales perpetradas por la presencia. La situación se volvió insostenible, por lo que empezaron consultar distintas fuentes para enfrentar el problema. Fue así como llegaron a los Warren.

Según el escritor Brian Fanelli, luego de varias investigaciones, el matrimonio concluyó que en aquella casa existía un espíritu maligno muy poderoso. Por ello, llevaron a cabo múltiples sesiones de exorcismo. Pese a esto, la entidad seguía presente. Mientras algunos sugerían que la familia estaba exagerando lo ocurrido, otros la defendían.

Finalmente, y pese a la experiencia que tenían, los Warren no lograron resolver este caso. Ed consiguió reunir material gráfico de lo ocurrido que muestra los eventos paranormales. Por su parte, Lorraine le comentó a New England Society For Psychic Research que en la casa de la familia Smurl habían 4 espíritus: una anciana inofensiva, una joven agresiva, un hombre que alguna vez habitó la vivienda y, por último, un demonio. Este último sería quien manipulaba al resto de entidades.

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