Empresa fabricante de populares snacks se declaró en quiebra: También la acusan de trabajo infantil
Una empresa productora de snacks dulces y salados se declaró en quiebra para lidiar con una deuda multimillonaria. La reestructuración llegó después de que reportaje la acusó de emplear trabajo infantil en fábricas de cereal, barras de granola y aperitivos.
En noviembre del 2024, la compañía Hearthside Food Solutions, detrás las marcas Cheetos, Chewy y Lucky Charms, se acogió al Capítulo 11. El año anterior, The New York Times reveló que niños migrantes estaban trabajando en peligrosas condiciones.
Tras las acusaciones y luego que el Gobierno iniciara una investigación, Hearthside rompió relaciones con las agencias externas que los empleaban. Aunque aseguró que hubo "consecuencias inmediatas y duras", según Reuters, negó su influencia en la bancarrota.
La deuda de 1.900 millones de dólares es la principal razón para la quiebra, que espera subsanar con un financiamiento de US$150 millones. Sumando otros US$150 millones de sus prestamistas, señaló Infobae.
Mientras se procesa la bancarrota, Hearthside continuará normalmente con su fabricación de snacks. "Hemos tomado la decisión de dejar atrás los desafíos de nuestra compañía y estamos motivados por las mejoras que ya hemos visto", dijo la CEO Darlene Nicosia.
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