Destapó cómo reaccionó los primeros días del escándalo: Camila Andrade expuso los mensajes que recibió tras polémica con Kaminski

La modelo Camila Andrade expuso los feos mensajes que recibió tras la polémica con Francisco Kaminski y Carla Jara. En el primer capítulo de "Damas Primero", que conduce Claudia Salas, abordó la situación vivida hace unos meses.

En el espacio, contó cómo reaccionó los primeros días del escándalo. "Los primeros días estaba bien en shock. Aparte te das cuenta cómo todo empieza a crecer. Ya todos los programas hablan de eso, todas las personas, las familias. En un minuto fue casi tema país", dijo.

"Los primeros días muy en shock, no lloraba, casi no hablaba. Después uno empieza a caer en cuenta en la situación en la que se encuentra. Ahí llorar, desganada, no tenía ganas de salir de la casa. Uno logra empatizar con el dolor que tú puedes generar, o la consecuencia que puede traer esa noticia", agregó.

“Me han preguntando cómo se sale de esto y es súper difícil responderlo, porque no tengo la receta, no tengo la fórmula. Es puro corazón. Hay algo en ti que te tiene que decir si vas a tener la capacidad de salir de esto. Porque es súper fácil agarrar un camino corto, indeseado, negativo de tu vida...", expuso.

Ante ello, Salas le consultó "¿Cómo cuál" y Andrade le respondió "como dejar de vivir. O quedarte en una depresión endógena eterna". La conductora, en tanto, le preguntó si lo llegó a pensar.

Camila Andrade expuso los comentarios que recibió tras la polémica con Francisco Kaminski

¿Qué dijo Andrade? Señaló que "mira, si lo pensé, te diría que lo que más me pasaba a mí es que cuando yo leía tantos mensajes que me incitaban a la muerte, que yo misma lo hiciera, esos mensajes igual invaden mucho tu cabeza".

"El cerebro es tan obediente que tú empiezas a leer y a estimularte con imágenes todo el tiempo. Y todo el tiempo, y todo el día era eso", complementó.

Incluso, reveló que en un minuto debió tomar la decisión de no tomar más su teléfono. "En un minuto tuve que tomar la decisión de tomar mi teléfono y decir basta, no más”.

"Yo no alcancé a tener ese pensamiento en concreto. Pero es súper triste llegar a ese punto, teniendo una vida por delante (...) Finalmente creo que no hay nada tan grave en la vida. Y eso es algo que aprendí en el encierro también. Que uno a veces se ahoga en un vaso de agua", sentenció.