Karen Doggenweiler considera "del siglo pasado" las críticas por su esposo ME-O en la previa al Festival de Viña
Karen Doggenweiler finalmente logró llegar a la animación del Festival de Viña del Mar, pero su ascenso no ha estado libre de críticas, especialmente por su marido Marco Enríquez-Ominami. El candidato presidencial levantó cuestionamiento por su posición sobre Venezuela, tras su visita por las elecciones de julio.
En conversación con Culto, la conductora calificó que es "muy injusto" el vuelco político que le dieron a su nuevo rol en la televisión chilena. "Mi carrera es mía. La he hecho yo, la he construido yo, con mucho esfuerzo, con dedicación, con compromiso, con convicción", expresó.
Doggenweiler reiteró que "siempre me he mantenido independiente en mi carrera. Soy mamá, soy periodista, soy mujer. No puede ser que en Chile a uno se la juzgue por lo que supuestamente dice o dijo o hizo el marido". También aprovechó de recalcar su cercanía con las mujeres televidentes y el público general tras programas como "Mamá a los 15" o los matinales "Mucho Gusto" y "Buenos Días a Todos".
En la misma línea, aludió a una visión anticuada del matrimonio, "es una situación que parece como de 1900. No sé, no sé ni qué año decir, 1940, no sé. Que te hicieran una pregunta así o ver comentarios así, yo creo que son de otro siglo”. "Es bien increíble, insólito, es como del siglo pasado. Y te insisto, no es posible que en Chile uno se case y pierdas tu identidad o pases a ser la extensión de tu marido", agregó.
Karen también acusó recibo de los rumores que apuntaron a un retraso en su anuncio como animadora del Festival de Viña. Negando que tuvo relación alguna con la postura política de ME-O, "no existió eso, de ninguna manera. Y hemos seguido cada uno de los hitos, y ahora viene la oficialización del animador".