Coro Teatro Dante: el diamante en bruto de la Región del Biobío
A solo meses de su conformación, el Coro Teatro Dante entró a la escena como el diamante en bruto de la Región del Biobío.
Cobijado por la comuna de Talcahuano, salió a la luz en abril de este año. Desde ahí, el trabajo del equipo supera todo tipo de proyecciones a corto plazo, permitiéndoles soñar hasta con los escenarios más importantes del país.
Y es que recientemente el Coro cambió las tablas del Teatro Dante por la inmensidad de la Tortuga de su comuna hogar, como teloneros del concierto de Luis Jara el pasado 18 de abril.
Tantas fueron las ganas de más, que ya tiene próxima fecha para abrir el concierto. Próximamente, calentaran motores para la Sonora Malecón, el 13 de agosto en la Tortuga de Talcahuano a las 16:00 horas.
"Los coristas son de alto nivel"
El Coro Teatro Dante partió en febrero del 2024. Desde la administración del espacio cultural, se contactaron con las mentes maestras del equipo, las directoras Katherine Castro Mora y Mabel Acevedo Ibáñez.
En conversación con SABES, una de las integrantes del equipo aseguró que sin ellas, nada de esto sería posible. Para ella, todo se debe al gran nivel de los integrantes y a la propuesta que le ofrecen al público.
El grupo está conformado por 20 personas de todas las edades. Según lo informado al medio, la mitad son estudiantes y el resto se divide entre profesionales de las distintas áreas, padres y madres de familia.
Y es que eso es lo que, según comentó la corista, le da sazón al grupo. Para ella, “somos un coro súper inusual”. “Si tu te esperas un coro de túnica y carpeta, eso no somos nosotros”, aseguró con gran emoción en su voz.
La integrante explicó que su puesta en escena “combina el trabajo vocal con el trabajo de los coristas”. Mezclando distintos tipos de música, utilizando la diferencia entre generaciones a su favor. Incluso, adelantó que prontamente integrarían coreografías de salsa en el espectáculo.
La corista define al equipo como “energético” y afirmó a SABES que esta es la clave que los ha llevado tan lejos en tan poco tiempo. No son un coro de ángeles, son sabor en las venas.
“Por amor al arte”
Bien conocido es el dicho “con plata baila el mono”. Para el Coro Teatro Dante, el canto, el baile y las ganas no tienen nada que ver con el signo pesos. A pesar que si están buscando financiamiento y esperan pronto poder conseguir alguna remuneración, el corazón es más fuerte.
“Al final el tema del pago pasó a segundo plano, el tema es hacerlo y hacerlo bien” se dijo a SABES. Porque la inversión de los coristas es total. Quienes en cada ensayo dan todo lo que tienen para entregar un show que conecte con el público.
Se trata de generar un espacio único, en el que los celulares no están invitados pues el interés de la audiencia va más allá. Para la integrante, esta fusión entre el Coro y los asistentes se da “cuando la persona deja el celular al lado y se pega en lo que yo estoy cantando, ahí tengo una conexión particular con el público”.
Pues después de probar un escenario con miles de personas, generaron una adicción a la “pila” que inyectan los gritos y aplausos. Porque “si logramos emocionarte y logramos energizarte con nuestro show nos damos por pagados”, afirmó en la conversación.
Porque el arte los mueve al son del mismo soneto. Uno que los hace soñar con nuevas aventuras, con nuevos públicos y, a sabiendas de lo difícil que puede ser, miran hacia el cielo, como queriendo hacer bailar a los santos.
“Nos encantaría comenzar con una especie de gira que se alejen un poco de Talcahuano, como una gira regional". Y aunque les encantaría lanzarse al público nacional, el que mucho abarca poco aprieta y el Biobío tendrá que ser el comienzo.
La familia como acreedor de ausencia del diamante en bruto
Pero no todo es color de rosa y a veces las canciones también son tristes. Como toda cosa bien hecha, este trabajo demanda tiempo, dedicación y horas de ensayo.
Por supuesto, los desafíos, como una gira regional, nacional o incluso el Festival de Viña parte en el mismo sitio, esa sala de ensayo, en la que luchan por coincidir y congregar sus voces, bailes y espectáculos.
Porque el público puede ser un motor pero también el mayor inquisidor, y las buenas reacciones y comentarios sobre su desempeño solo los obligan a crecer y superarse, pues el apoyo, para bien o mal, tiene que justificarse.
“Ese es el desafío más grande, hacer calzar los tiempos de los 20”, aseguró la integrante a SABES, pues la vida corre en muchas pistas y muchas veces la familia y los ensayos van en carriles contrarios.
Porque un sueño no se sostiene solo de ambición. Con una voz melancólica y no tan entusiasta como la que usó para describir su trabajo, la corista confesó que “es difícil” pues “hace que las familias sean acreedores de ciertas ausencias, pero yo creo que cuando hay amor hay compresión igual”.
Incluso, con un nuevo ánimo calificó a la familia como “los mejores fans del Coro”. Pilares que sostienen las metas de 20 personas que eligieron esta dimensión para comprometerse en un mismo tono, bajo una misma partitura.
El diamante en bruto de la Región del Biobío, el Coro Teatro Dante, cultivado con esfuerzo, promete grandes éxitos. De la mano de sus directoras, rezarán antes de cada función para que Dios, la fuerza superior o quién sea que los está encaminando, no los suelte hasta llegar a la nota más alta.
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