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El primer semestre de este año escolar está por finalizar y aún existen, casos específicos en Concepción, de niños, niñas y adolescentes que no han encontrado una matrícula para asistir a clases.

Eso sí, a la Corte de Apelaciones de Concepción llegó el caso de una joven que debería cursar 1° medio, pero no lo hace, ya que se encuentra sin colegio.

De acuerdo a lo que señala el recurso de protección, la joven salió el año 2023 de una escuela que no tenía enseñanza media, por lo que, a través del SAE postuló a distintos colegios del Gran Concepción, quedando en todos ellos en lista de espera.

A raíz de esta situación, el 19 de marzo, la mamá de la joven llamó al Colegio Metodista de Concepción, “a fin de solicitar una entrevista presencial con el personal a cargo de admisión y obtener un cupo en dicho establecimiento. Producto de esta llamada fue citada para el día 20 de marzo a las 09:00 horas para reunirse con la Inspectora General”.

Al concurrir al establecimiento, se lee en el recurso, “le comentan que hay un cupo y que se puede iniciar el proceso de matrícula, para lo cual debía completar información en unos documentos, firmar el contrato y posteriormente concurrir a firmar el pagaré ante notario, así como comprar las respectivas estampillas. Todas estas gestiones fueron realizadas a la brevedad”.

Error en el proceso de matrícula en Concepción

Eso sí, no todo podía ser miel sobre hojuelas, ya que durante la noche de ese mismo día, desde el colegio contactaron a la familia para informar de un problema en el proceso, por lo que le solicita que asista al recinto.

“La inspectora general le comunica que existió un error de su parte y que la matrícula fue anulada. Este hecho produjo gran consternación en mis representadas, quienes no concebían que algo así estuviera pasando, el día anterior se había firmado el contrato y el pagaré, se habían comprados los útiles y el uniforme”, dice el texto.

Al día siguiente, “el establecimiento remitió un correo electrónico a la casilla de e-mail en el contrato asumiendo el error y disculpándose por lo ocurrido, se adjunta una carta entregando información de la anulación de matrícula, anulación en que la otra contratante jamás ha consentido”.

En la mencionada carta, la inspectora justificó la determinación en que “el cupo era para una estudiante que estaba en el n°1 de la lista de espera del SAE y estaba citada para venir ese día a hacer efectiva la matrícula, es por esa razón que se produjo la confusión al dar matrícula a su hija, la que se encuentra en el n°61 de la lista de espera del SAE".

Y complementan con que “por mandato del Mineduc, a contar de este año, todos los estudiantes que requieran matrícula en algún establecimiento público o particular subvencionado, debe estar inscrito en lista de espera administrada por ellos. Los colegios solo pueden asignar vacantes y posterior matrícula siguiendo el orden de postulación que asigna un número a cada uno de ellos”.

Incorporación a clases

El fin último que tiene esta presentación judicial es lograr que la joven pueda asistir a clases.

A raíz de esto, apuntan tanto a la dirección del Colegio Metodista de Concepción, como a la Seremi de Educación; en el primer caso, por ser los responsables del menoscabo que están viviendo y que la joven pueda retornar a clases.

Desde la Seremi de Educación, al ser consultados por SABES sobre este caso, respondieron que “no nos corresponde pronunciarnos sobre procesos judiciales en curso. Sin embargo, hay que tener en cuenta que la apoderada tiene la posibilidad de solicitar matrícula en otros establecimientos de Concepción, a través de la plataforma Anótate en la Lista. Actualmente existe una amplia y variada oferta de vacantes en la comuna, que permitirían a la estudiante continuar con su proceso educativo con normalidad, en el nivel que requiere”.

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