Una religiosa fue interrogada tras hallazgo en Ñuñoa: Dio detalles de por qué ocultó el cuerpo y confesó que "hubo pacto"
Este pasado lunes 8 de abril se reportó el hallazgo de un cuerpo en la comuna de Ñuñoa, en la Región Metropolitana. Tras diversas diligencias, se confirmó que la mujer tiene 60 años y la data de muerte es de seis meses.
Lo último que se ha sabido del hallazgo es que la Brigada de Homicidios de la PDI concurrió hasta un domicilio en calle Los Jardines, a dos cuadras de donde se halló el cadáver. En dicho lugar, viven dos religiosas, a quienes se les habría entrevistado y derivado a dependencias de la brigada.
Sin embargo, en torno a este caso, lo que llamó la atención fue que hayan interrogado a una mujer religiosa de 80 años en una unidad policial. A ella se le identificó como Lorena Patricia Ramírez, quien incluso tendría demencia senil.
Un pacto para mantener oculto el cuerpo: Los detalles tras hallazgo en Ñuñoa
En su declaración, según lo revelado por el periodista Sergio Jara en el matinal "Contigo en la Mañana", los restos sería otra "monja" que vivió con ella tras la muerte de su esposo y que hace meses habría muerto debido a un cáncer.
Debido al impacto y la pena, la monja que vivía con ella habría tomado la decisión de no sepultarla y mantener el cuerpo en condiciones no especificadas. Sin embargo, por razones que aún se investigan, el cuerpo terminó siendo encontrado al interior de una bolsa de género.
Lo último que se ha sabido en torno a ello es que la religiosa habría hecho un pacto. Así lo explicó el subprefecto Juan Fonseca, jefe de la Brigada de Homicidios Metropolitana.
"Esta persona hace un pacto con esta persona que fallece hace un año atrás y la mantiene en el lugar por el cariño que le tenía. Ellas mantenían una amistad. Ella manifiesta que le tenía mucho cariño y que habían hecho un compromiso entre las dos de que ninguna se iba a denunciar si fallecían", sostuvo.
Detallando que "entendemos que debió haber tenido un episodio, una especie de trastorno en algún momento de consciente. Ella denota que su amiga está en una maleta y quiere darle una sepultura. Ese es el motivo que indica ella, que la deja en una esquina para que se le dé una sepultura”.
Por su parte, el fiscal Francisco Lanas, explicó que "en el transcurso de algunos años, ella inicia una enfermedad. Una enfermedad que nunca se trató. Y en ese contexto, ellas hacen esta especie de pacto como de aislarse del mundo. Tenían una aspiración de ser como monjas de claustro, de no tener mayor contacto con el exterior".
Lo que habría motivado a la mujer a deshacerse del cuerpo fue la llegada de la hija de la "monja" fallecida. "La hija de esta señora vuelve al domicilio, entonces lo más probable que ella, con la probabilidad que (la hija) descubriera el cuerpo, es que decide (deshacerse del cuerpo). Sería la explicación lógica que tenemos", indicó el persecutor.