Presidente de la Sonami cierra la puerta a salvataje de la gran minería a Huachipato

Una de las alternativas que baraja el Gobierno ante la crisis de Huachipato es que las grandes mineras puedan ser los clientes preferentes de la producción de la usina.

Algo que ya ocurrió durante la pandemia, cuando China cerró sus fronteras y la minería debió recurrir al acero huachipatino para poder seguir operando.

Pero al parecer, el escenario que vive que ahora la usina es del todo conveniente para las mineras y el emplazamiento que realizó el ministro Nicolás Grau no gustó mucho en la Sonami, ya que la gremial no estaría dispuesta a trabajar de forma aliada con Huachipato.

Fue el presidente de la Sonami, Jorge Riesco, quien sostuvo que “Huachipato era proveedor de materia prima para la fabricación de bolas de molienda, y por lo tanto hay un efecto en la cadena de suministro de las mineras, que podría tener algún efecto y eso se está evaluando, me imagino yo. Pero hay que ser muy claro. Cada empresa tiene una estrategia para su cadena de suministro y tiene plena libertad, por lo que puede decidir sus compras de la manera que mejor estime y en esto tienen que regir de alguna manera el mercado”.

El líder gremial añadió que “ninguno de nosotros es indiferente, a nosotros no nos da lo mismo que haya más de 20.000 empleos que se vayan a perder en la Región del Biobío, obviamente que tiene que movernos a tratar de aminorar ese impacto, si es que se va a producir, como pareciera que así será, dado el nivel de pérdidas operacionales que tenía esa siderúrgica”.

Semejanzas entre Paipote y Huachipato

Jorge Riesco en este análisis, comparó lo que vive actualmente Huachipato con el cierre de la Fundición Paipote, en Copiapó, la que paralizó funciones en febrero de este año a la espera de una modernización.

Según Riesco “en algún momento hay que reconocer que la instalación no puede seguir funcionando en esas condiciones operativas, de costos tan altos, incluso con otro tipo de problemas medio ambientales, como era el caso de Paipote. En este caso pasa un poco lo mismo, de alguna manera tenemos que preguntarnos cómo se llegó a esta situación, qué cosas determinan que existan empresas que de alguna manera quedan fuera de carrera después de más de 70 años de funcionamiento exitoso y con el impacto que eso tiene en el empleo”.

El líder gremial es enfático en que “a mí no me parece bien en que apenas ocurra esto, se recurra a los grandes compradores de esos insumos para tratar de alguna manera de arreglar el problema. A mí me sugiere a veces que pareciera que se está tratando de trasladar la responsabilidad, decir que ustedes no hacen compras locales, etc. La verdad es que yo tengo mi reparo acerca de esta actuación a nivel del Ministerio de Economía, porque hay que hacerlo con mucho cuidado. Es cierto, no somos indiferentes, ninguna empresa lo es, ningún chileno lo es, pero hay que tener mucho cuidado sobre la autonomía, que a las empresas les corresponde para tomar sus decisiones con total libertad acerca de sus suministros”.

"Debemos analizar en profundidad cuál es el modelo de negocio, si la siderúrgica es una industria estratégica en el futuro, así como hemos dicho que son las fundiciones de cobre, veamos cómo podemos de alguna manera reponer eso. Pero yo creo que simplemente que con llamar a sostener o a decir de manera media elíptica que esto tiene que tener alguna forma de participación, la verdad es que hay que estar con mucho cuidado, sobre todo porque además no es la única empresa nacional que provee de esos insumos”, cerró Jorge Riesco.

Revisa más noticias de la Región del Biobío. Síguenos en Facebook y en Instagram para más información y fotografías de la contingencia del Gran Concepción.