"¿Y tu marido qué opina?": Los prejuicios detrás de la esterilización femenina en Chile
Por más que sea una decisión personal, aún existen trabas para la esterilización femenina, un método quirúrgico para las mujeres que no quieren tener hijos (o más hijos). Existen prejuicios por parte de profesionales médicos e incluso de las familias. Los que están presentes en normativas desactualizadas que siguen solicitando el consentimiento del cónyuge, como denunció una usuaria en redes sociales.
Esto vivió Marcela Carrasco, cuando pidió una salpingectomía bilateral, o sea la remoción de las trompas de Falopio, en el 2018. Le pusieron la condición de que su esposo tenía que darle permiso, además de juzgar su edad de 33 años, considerándola muy joven, aunque ya tenía un hijo.
Es más, su ginecólogo se negó repetidamente a autorizar el proceso con frases como "¿y tu marido? ¿Qué opina?". Al igual que "¿y si te separas de tu marido y tu nuevo marido quiere un hijo?". La paciente se asombró con la excusa de que "¿y si aparece un jeque árabe? y para dejarte toda su herencia te pide un hijo, ¿Qué vas a hacer?".
A pesar de contar con el consentimiento de su esposo y convencer a su médico, Carrasco no consiguió la operación. Ya que su Isapre no quiso cubrir los gastos bajo juicios similares: su edad y la opinión de su marido.
Desde entonces, la normativa del Ministerio de Salud (Minsal) avanzó para dictar que "la esterilización quirúrgica es una decisión personal y emanará de la voluntad libre manifestada por quien lo solicita. Sin que ello quede supeditado a la aprobación de terceras personas", señalaron desde la Seremi de Salud del Biobío.
En el Hospital Regional de Concepción, hay cerca de 256 mujeres en lista de espera para acceder a esta operación. Este es un "procedimiento complejo y avanzado", explicó su director Claudio Baeza, que debe ser solicitado en la atención primaria para iniciar un proceso de consultas y exámenes. Las pacientes pueden esperar entre 6 a 8 meses antes de ingresar al pabellón.
Oye Clinica Dávila para hacerse una Salpingectomia bilateral (esterilización de la mujer) piden un documento notarial y si se puede UN PERMISO DEL CÓNYUGE
— Lorna Aguilar (@Lornibaby) February 17, 2024
Que cuma de su parte pic.twitter.com/XMMvOavJdT
¿Qué es la esterilización femenina?
Como señala el Minsal en la Circular N°9 del 2022, la esterilización quirúrgica se refiere a procedimientos realizados en hombres y mujeres para evitar la concepción de hijos. Se describen como altamente eficaces y en ocasiones irreversibles. Por lo que se recomienda que los usuarios que la solicitan estén informados para tomar una decisión libre y voluntaria.
En particular la esterilización femenina contempla dos maneras de realizarla, "ligando las trompas, o sea, cortando, quemando y amarrando. O sacar la trompa completa", explicó la médico jefe del Servicio de Ginecología y Obstetricia del Sanatorio Alemán, Dra. Damary Ramos.
En esto último consiste la salpingectomía bilateral, que remueve las dos trompas de Falopio con el fin de no recibir los óvulos, impidiendo la fertilización.
Este proceso solicitó la usuaria de X, Lorna Aguilar (@lornibaby), en la Clínica Dávila de Santiago, quien dio cuenta que el reglamento pedía el consentimiento del cónyuge en pleno 2024. Lo mismo vivió Marcela Carrasco en el establecimiento mencionado, solo que en el 2018, cuando la normativa aun no estaba vigente.
En el Biobío, este procedimiento se puede solicitar en la atención primaria para iniciar un proceso de acompañamiento y atención médica en el Hospital Regional de Concepción.
Según explicó su director, Claudio Baeza, "se realiza primero una citación con médico matrona, se actualizan los antecedentes, su historial clínico, se aclara las dudas de la cirugía y se solicitan los exámenes preparatorios. Una vez revisados los exámenes preparatorios y están dentro de rangos normales, se programa la cirugía. Más o menos el tiempo de espera para una cirugía de esterilización está entre el orden de los 6 a 8 meses".
La necesidad por derechos reproductivos
Según la web de MUSA Chile, un programa de Laboratorios Chile, los derechos reproductivos de las mujeres incluyen decidir libre y responsablemente el número de hijos que quieren tener. Asimismo, estas deben ser capaces de decidir cuándo, con quién y la frecuencia para tenerlos, al igual que tener acceso a métodos anticonceptivos si desean lo contrario.
En este contexto, la esterilización femenina resulta esencial para quienes buscan un proceso definitivo y quieren priorizar otros aspectos de su vida, como Marcela Carrasco.
"Yo ya tenía un niño y no quería tener otro. Además privilegié mi trayectoria, o sea, yo después volví a estudiar, hice un postítulo en el extranjero. Entonces yo ya no quería tener otro hijo", comentó la mujer.
Ejercer un derecho como la esterilización femenina también puede ser beneficioso para la salud. La misma Carrasco estuvo décadas consumiendo anticonceptivos, "empecé a tomar pastillas súper chica, a los 15. Entonces yo ya llevaba 20 años tomando pastillas y para nadie es un secreto que son súper dañinas a la larga. Las mujeres tenemos mayor riesgo de accidentes cerebrovasculares, cardíacos", explicó.
Por otro lado, también podría ser efectiva para prevenir el cáncer de ovario. La Dra. Ramos precisó que "hay una teoría de cáncer de ovario que se asocia con las trompas remanentes que eventualmente quedan sin utilidad. Entonces uno, para prevenir riesgo oncológico, debería ofrecer la salpingectomía, que es la trompa completa".
De profesionales a familiares: Prejuicios sobre la esterilización femenina
A raíz de la denuncia a Clínica Dávila por pedir el permiso del cónyuge, la usuaria Lorna Aguilar destapó una conversación que está cargada con tabúes.
En el caso de Marcela, además de las dudas de su ginecólogo de cabecera, que incluían balancear la decisión de parejas y jeques inexistentes, también los sufrió de sus cercanos. "Todas mis amigas me cuestionaron mucho, así como '¿estás segura?, piénsalo, ¿y si después te arrepientes? (...) me chocó esa parte", comentó.
Lo vivió también con su madre, "ni te explico cómo reaccionó, atacada porque quería operarme. Una concepción super antigua de que iba a ser menor mujer". Asimismo, siempre juzgaron su edad, ya que aun la consideraban joven y apta para tener hijos, como juzgó la Isapre que le rechazó cobertura.
A pesar de esto, resalta que siempre tuvo el apoyo de su marido, quien no fue el obstáculo para operarse, sino un sistema anticuado que aun no avanzaba en los derechos reproductivos.
Pero en pleno 2024, para la Dra. Damary Ramos hay que recordar que "la mujer es dueña de su cuerpo y decide independientemente de lo que diga la pareja". "La mujer tiene total autonomía" agregó, mencionando que como Sanatorio Alemán "ni siquiera nosotros para la esterilización pedimos una autorización notarial".
Lo mismo señala la ley 20.418, precisaron desde la Seremi de Salud del Biobío. "Para la esterilización quirúrgica voluntaria en personas mayores de 18 años, sólo es necesario el consentimiento informado. Cualquier limitación en el acceso a la prestación, ya sea por sexo, edad, género, etnia, número de hijos u otra, es una discriminación arbitraria y contraria a la norma de regulación de la fecundidad", sentenció.
Tras un reportaje de El Ciudadano sobre el mismo tema, la Clínica Dávila les indicó que el documento denunciado estaba obsoleto. Así como que se acercaron a la usuaria Lorna para aclarar la situación, sin respuesta de su parte. La internauta compartió que le hicieron llegar el documento correcto, un consentimiento informado, mas no le respondieron sus mensajes.
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