Editorial: Ley del Lobby se hizo precisamente para las reuniones de Zalaquett con los ministros
La ley del Lobby nace el año 2014 para regular una situación compleja que ocurría con los famosos lobistas.
Editorial audiovisual del medio Sala de Prensa
Los lobistas son personas que representan determinados grupos de interés y que abogan para que sus representados sean escuchados o bien derechamente beneficiados por alguna política pública.
Pensemos por ejemplo que en el Congreso se estuviese legislando sobre minería, pues bien, antes de esta ley el parlamento estaba lleno de personas que conversaban, entregaban mensajes con papelitos, presionaban, gestionaban reuniones o hasta hacían regalos a los parlamentarios para que se legislara a su favor.
La ley nace para regular esta práctica que claramente se prestaba para la corrupción de los funcionarios públicos. Sino recuerde el caso del ministro de vivienda de Eduardo Frei, Edmundo Hermosilla quien el año 1997 recibió un caballo como regalo por parte de una empresa constructora. Hablamos del famoso caso de las casas Copeva.
Después de la promulgación de la Ley del Lobby desde el Presidente de la República hacia abajo deben anotar y publicar las reuniones que sostengan con cualquier persona que represente un grupo de interés, ni hablar de los lobistas (eso es demasiado obvio) también debe anotar los regalos que reciba, de qué tratan las reuniones que sostiene, en fin, anotar todo dando la mayor transparencia posible al sistema.
En este contexto el medio Ciper da a conocer la reunión "secreta", reservada o privada dirán algunos que varios ministros de Estado tuvieron en la casa de un conocido lobista Pablo Zalaquett con ejecutivos de las empresas salmoniculturas.
A la luz de los antecedentes que hasta ahora se han ventilado, esta serie de reuniones aparecen como una torpeza máxima, queda la sensación publica que los ministro se saltaron la ley simplemente porque se oculta algo.
El Gobierno salió a defender a los secretarios de estado diciendo que fueron reuniones más bien generales, que no estaban en horario de trabajo y varias excusas más que creemos no alcanzan a exculpar a estas autoridades.
El espíritu de la ley del lobby es arrojar el máximo de transparencia al sistema, todas las negociaciones de cualquier naturaleza deben ser de cara a la ciudadanía y no en la casa de un lobista y sin que nadie sepa.
Revisa más noticias de la Región del Biobío. Síguenos en Facebook para estar al tanto del día a día penquista. También en nuestro Instagram para ver fotografías con datos de contingencia nacional y del Gran Concepción.