Editorial: Pese a todo lo dicho y hecho la capacidad operativa de las orgánicas más violentas de la macrozona sur al parecer está intacta
Fotografía: Cedida DPR

Editorial: Pese a todo lo dicho y hecho la capacidad operativa de las orgánicas más violentas de la macrozona sur al parecer está intacta


Por Equipo Sabes | 22 Diciembre 2023 11:51
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A fines de noviembre hubo una reunión en la Delegación Presidencial del Biobío. En este encuentro estuvo el subsecretario del Interior Manuel Monsalve, los encargados de la defensa nacional y la propia Ministra de Defensa. El objetivo de esta reunión era evaluar el trabajo desarrollado en la Macrozona Sur.

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Y la noticia que comunicaron las autoridades fue la siguiente: "Hubo una disminución de los diferentes hechos violentos en la Región de la Araucanía y las provincias de Biobío y Arauco durante el 2023. Se trata de los ataques incendiarios, que disminuyeron un 25% en relación al 2022 y un 40% menos que el año 2021; y una baja en los hechos de violencia rural, disminución que alcanza el 12% en comparación al año 2022 y un 43% versus el 2021"

Los datos son certeros, nadie podría negar esta verdad estadística. A esto hay que sumarle una mayor eficiencia de la justicia, que durante este año ha logrado desbaratar las bandas más importantes de robo de madera y ha puesto a disposición de los tribunales a quienes serían los principales líderes de las organizaciones más violentas del cono sur.

Sin embargo, esta semana todo se ha ido al tacho de la basura y las orgánicas han hecho lo que han querido.

Ayer solamente se quemaron 5 casas a orillas del lago Lanalhue en Contulmo y cortaron todos los caminos que quisieron, 24 horas antes sabotearon la línea férrea en Colcura (algunos dirán que ese hecho no cuenta pues geográficamente esta fuera de la jurisdicción del Estado de Excepción, desde esta tribuna estimamos que afirmar esto sería un error garrafal), y a inicios de la semana hubo más cortes de camino y otra cabaña quemada.

Todo esto demuestra dos cosas. Primero, que pese a todo lo dicho y hecho, la operatividad de los grupos más violentos permanece intacta. ¿Y cómo es posible esto? básicamente por el modo de funcionar de estos grupos. El trabajo que desarrollan estaría tremendamente compartimentado y eso permite que pese a que caiga un líder sigan operando con total normalidad.

Lo ocurrido esta semana además demostraría que no basta con el trabajo policial y judicial para enfrentar este tema. Es importante también el trabajo de fondo a cargo de la Comisión para la Paz y el entendimiento que lastimosamente por estos días no lo pasa muy bien.

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