Declaran a Humedal Desembocadura Río Biobío como Santuario de la Naturaleza
Este lunes, se concretó un importante hito en la protección de la biodiversidad, luego de que se publicara en el Diario Oficial el decreto de creación del Santuario de la Naturaleza Humedal Desembocadura Río Biobío, considerado un ecosistema de gran riqueza natural por la presencia de flora y fauna nativa y endémica.
Esta área protegida se ubica en el corazón de la Región del Biobío, específicamente entre las comunas de Concepción, Hualpén y San Pedro de la Paz, y contempla una superficie aproximada de 2.174 hectáreas. Cientos de aves habitan el lugar, siendo una zona reconocida a nivel mundial por BirdLife International como un Área Importante para la Conservación de las Aves.
En dicho santuario también existe la presencia de flora acuática, cuatro especies endémicas de peces y cuatro especies nativas de anfibios. De estas últimas, todas están en categoría de conservación, como la rana chilena y el sapo rosado, en categoría casi amenazada.
La ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas, destacó que “esta área posee una importancia ecosistémica innegable para el Gran Concepción, dado que aquí habitan muchísimas especies nativas y endémicas, pero también porque aquí se obtiene agua para diversos usos, incluida la recarga de napas subterráneas. Además, posee un valor sociocultural ya que las personas aquí se conectan con la naturaleza e incluso hay zonas de relevancia histórica y arqueológica”.
Asimismo, se han identificado siete especies de reptiles en el área propuesta, de las cuales cuatro son endémicas y tres son nativas, una de ellas catalogada como vulnerable.
La aprobación de este santuario de la naturaleza ayudará en la conservación de un ecosistema de alto valor para la región y el país, donde también se protegerá la biodiversidad de la zona, en la que se han registrado más de 140 especies de aves, 71 especies nativas de flora, peces, anfibios y reptiles nativos con alto endemismo.
Avanzando en la Meta 30x30
La creación de este santuario suma más de 2.170 hectáreas a la Meta 3 del Marco global de biodiversidad, donde Chile se compromete a garantizar que, para 2030, al menos un 30% de las zonas terrestres, las aguas continentales y las zonas marinas y costeras estén protegidas y bien manejadas.
Próximamente, se iniciará el trabajo de elaboración de un Plan de Gestión y Gobernanza, que permita establecer cuáles con las próximas acciones de restauración en el lugar y los distintos usos en este espacio. Lo anterior, para asegurar una correcta gestión de esta nueva área protegida y asegurar la representación sociocultural a través de la conservación de un ecosistema que presenta diversos servicios y provee de recursos, usos y valores a las personas.
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