Sabes Arqueología 1: Fuerte Ballenar de Antuco, el tesoro que era vendido como una parcela de agrado
Hoy, con la historia del Fuerte Ballenar de Antuco iniciamos en Sabes.cl la publicación de 5 reportajes sobre sitios arqueológicos en la Región del Biobío.
Sabes Arqueología es una de las iniciativas ganadoras del fondo de medios 2023 financiado por el Ministerio Secretaria General de Gobierno y el Core Biobío y realizado por Sabes.cl el Diario Digital del Gran Concepción.
En el canal de youtube de Sabes.cl puedes observar una pieza audiovisual donde podrás ver en imágenes el fuerte español de Ballenar ubicado camino a Antuco.
"Se vende parcela con fuerte español"
Hoy la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC) es dueña del fuerte Ballenar ubicado camino al volcán Antuco.
Esta historia comenzó hace algunos años, cuando un particular decidió parcelar sus tierras y en una de esas subdivisiones estaba emplazado lo que parecía ser un fuerte español. Al momento de vender el terreno publicó un letrero donde se podía leer "Se vende parcela con famoso con fuerte español Ballenar" en su interior.
De este hecho se enteró el primer equipo de la PUC que llegó al lugar, presidido por el arquitecto Emilio de la Cerda. De inmediato, tomaron contacto con el dueño e iniciaron los trámites para comprar el terreno. Así lo hicieron. Posterior a ello, se adjudicaron un proyecto que ha permitido realizar las primeras excavaciones.
El arqueólogo Roberto Campbell de la PUC afirma a Sabes.cl: "El sector hace un par de años fue loteado para parcelas de agrado. En ese contexto es que el predio con el fuerte Ballenar lo adquirió la U. Católica. En definitiva ahora el fuerte está mejor protegido que si hubiese quedado en manos de un particular y al mismo tiempo ahora el fuerte forma parte de una comunidad mayor de gente interesada y preocupada que son los mismos vecinos del fuerte. En ese contexto el año 2016 si mal no recuerdo y de la misma forma que los vecinos compraron sus parcelas es que la U. Católica decidió adquirir el fuerte Ballenar".
El arqueólogo Roberto Campbell en el sitio del fuerte Ballenar en Antuco /Pedro Andrade
Fuerte Ballenar de Antuco fue fundado por Ambrosio O'Higgins
En Sabes Arqueología tomamos la decisión de no dar a conocer la ubicación de los sitios arqueológicos que visitemos. El objetivo es evitar que estos lugares sean sometidos a saqueos, cuestión lamentablemente cada vez más usual. Sólo diremos que el fuerte está emplazado camino a Antuco y para llegar a él se requiere permiso de los propietarios, en este caso de la Pontificia Universidad Católica.
Junto al arqueólogo de la UdeC Pedro Andrade visitamos el lugar. Lo primero que nos llama la atención es la existencia aún de un foso que cruza desde el cerro al río Laja.
El arqueólogo UdeC Pedro Andrade sobre el fuerte Ballenar de Antuco / Sabes.cl
Andrade da a conocer el objetivo del foso: "La idea era limitar el paso. Este foso largo debe tener más de un kilómetro y acá tenía un puente. El único lugar donde los animales y personas podían pasar era por aquí. Esto permite que la guarnición que estaba en el fuerte pudiera controlar quién pasa y cuántos pasan. Se controlaban los animales que pasaban por aquí y cuántos volvían porque a veces podían volver un poco más. Este fuerte queda adosado a una línea fronteriza donde está Tucapel, éste de Ballenar, Príncipe Carlos a la orilla del río Duqueco y Santa Bárbara que está a la orilla del Biobío. Entonces se arma un sistema de frontera oriental, ligado principalmente a la Hacienda las Canteras".
Recordemos que la construcción de Ballenar la ordenó Ambrosio O'Higgins, quien por esos años era intendente de Concepción y además dueño de la Hacienda las Canteras, que más tarde heredó a su hijo Bernardo.
"Para ponerlo en términos simples y sencillos, lo que hace Ambrosio O'Higgins con la instalación de estos fuertes lo es ponerle cámaras de seguridad a su propiedad" sentencia Pedro Andrade.
¿Qué sucedía al interior del fuerte Ballenar de Antuco?
El investigador y especialista en la línea de fuertes del Biobío, Luis Toloza, es quien confirma que el fuerte de Ballenar formaba parte de una serie de emplazamientos en la zona precordillerana, "junto a los fuertes de Tucapel, Santa Bárbara y príncipe Carlos permitían a los españoles tener control de esta zona".
"Eran todos emplazamientos - afirma Pedro Andrade- donde residían por temporadas solo un pequeño grupo de soldados. Para el caso de Ballenar, solo lo ocupaban en temporada primavera-verano, pues las condiciones meteorológicas con nieve en invierno impedían la residencia permanente de los soldados", afirmó.
Plano del fuerte Ballenar donde se puede observar con detalles las dependencias que tenía el emplazamiento, destaca el foso y una rampa especial para el ingreso de carretas o cabalgaduras.
Intercambio con la población local y rol de las mujeres
Todos los expertos coinciden en señalar que en estos emplazamientos era imposible que no hubiera contacto de los soldados con la población residente. Prueba de ello, es que no resulta difícil encontrar restos de cerámica indígena en las cercanías y en particular de la noria (pozo para sacar agua) que aún existe en el lugar.
Sobre el rol de la población indígena o de la existencia de comunidades en estos lugares no hay mucho y menos se sabe del rol de las mujeres. Este último tema casi no se ha investigado.
Conversamos con Maríarebeca Sabag, licenciada en historia y encargada de cultura de Santa Juana quien nos señala: "Desde su llegada en un primer momento empezaron a llegar mujeres vinculadas a la Iglesia Católica. Ya después del asentamiento y la creación de estas infraestructuras, como son los fuertes, la mujer tuvo un mayor posicionamiento y un rol fundamental en temas del hogar, reproducción, alimentos, o con la Iglesia. Fue un proceso de larga ocupación por lo tanto las mujeres también tenían un rol. La forma en como ellas habitaban el territorio hizo que siempre tuvieran un rol un poco oculto en la historia y que no ha sido tan relevado" afirmó.
Ballenar, la comunidad y el monumento Nacional
El proyecto que encabezan los profesionales dirigidos por Roberto Campbell tiene una derivada muy interesante. Esta es conocer que relación tiene la comunidad con este emplazamiento español. Este hecho ha implicado que el trabajo de este equipo multidisciplinario de profesionales no sea solo excavar el sitio, sino conversar con los vecinos.
"Al día de hoy -afirma Campbell- la relación de la gente de Antuco con el fuerte Ballenar está un poco resquebrajada. En el sentido que, si uno va a hablar con la gente más antigua del sectores como el Castillo, Villa Peluca de Antuco ellos recuerdan visitar el fuerte, escuchar leyendas y mitos que se cuentan sobre estos sectores o espacios abandonados. Pero esto fue loteado y eso resquebrajó esta relación. Lo mismo ha pasado con otros fuertes como el Príncipe Carlos (ubicado en Santa Bárbara).
El relato del arqueólogo Campbell continúa señalando que, "a través de la investigación, sería muy bueno tratar de reconstruir esa relación, de recuperar esa información y tratar de entregarla a estas comunidades actuales a su vez. Esto está vinculado a que Ballenar y Príncipe Carlos no son monumentos históricos. Y en el caso que llegaran a serlo, debiera ser el primer monumento tanto para la comuna de Antuco como Santa Bárbara. Hay una oportunidad tremenda para darle una nueva vida a estos espacios patrimoniales que son bastante significativos para la historia de Chile como para la memoria que aún queda en las comunidades locales" afirmó.
Estado de conservación de Ballenar de Antuco
En Sabes Arqueología visitaremos varios sitios arqueológicos. En todo ellos observaremos su estado de conservación. También observaremos con particular detalle si hay basura en sus alrededores o si sencillamente han sido vandalizados, por ejemplo.
Afortunadamente, no es el caso de Ballenar en Antuco. En general, el lugar tiene un muy buen grado de conservación, aunque siempre se encuentra basura.
Seguramente su buen estado, se debe al hecho que esta dentro de un terreno particular. Esto seguro ha evitado su deterioro. Aunque nunca faltan las latas de cerveza y plásticos que arroja personas suponemos inconscientes del daño que generan.