Alcaldes del Biobío acusan nulos avances en medidas preventivas para la nueva temporada de incendios forestales
Los incendios forestales del verano pasados fueron desastrosos en el Biobío. Más de 16 personas fallecidos, 172.125 hectáreas consumidas por el fuego, el trabajo de brigadas provenientes de 8 países de América y Europa, y el despliegue de aeronaves de largo alcance como el Lockheed C130, McDonnell Douglas MD87 y el McDonnell Douglas DC10.
Pero también dejo una tarea a las autoridades de la Región en materia de prevención para que este tipo de siniestros no vuelvan a ocurrir de la manera en que sucedieron. Y a su vez, que exista un protocolo ante estas emergencias que son relevantes y requieren un trabajo de contención y apoyo excepcional.
Al parecer todo lo anterior no ha ocurrido, acusan los alcaldes de las comunas afectadas por las llamas durante el pasado mes de febrero, hecho que les causa preocupación, ante una posible repetición del escenario que se vivió en el verano pasado.
El alcalde de Nacimiento, Carlos Toloza comentó que “he visto muchas intenciones y espero que se materialice, pero esto debería ser una política de Estado, ya que existe una mirada cortoplacista y Senapred debería tomar un rol coordinador en esta materia. La articulación es la única forma para hacer un trabajo preventivo, sino se aprendió algo de lo que pasó en el verano, es porque no queremos aprender”.
Su par de Santa Juana, Ana Albornoz, aseveró que “hemos realizado varios oficios a distintas organismos para conocer ciertas situaciones. Entendemos que desde el Gobierno hay una coordinación con las forestales, pero como alcaldesa de Santa Juana yo no lo he visto. Tenemos que tomar medidas de corto y largo plazo para tomar medidas y evitar lo que ocurrió en el verano”.
Adelantar trabajo
En tanto, el alcalde de Mulchén, Jorge Rivas consideró que “hay un trabajo a menor velocidad, pero es necesario aumentar la frecuencia de ellas, es necesaria una coordinación y preparación para evitar la magnitud de los daños que dejaron los incendios del verano”.
A la vez que su par Antonio Rivas, de Chiguayante, apuntó a que “se requiere una intervención colectiva entre los actores público-privados y creo que debe existir un diálogo horizontal entre todos los involucrados. Las empresas deben tomar medidas con bastante antelación con estos fenómenos”.
Acciones
En CMPC también existe preocupación por lo que pueda ocurrir en el verano y para ellos es primordial ir un paso adelante.
El gerente general de Empresas CMPC, Francisco Ruiz-Tagle indicó que “tenemos más de ocho mil kilómetros de cortafuegos y ahora estamos adelantando la construcción de estos y bajando la carga calórica cercana a las zonas urbanas. También es importante disminuir la intencionalidad, porque los incendios forestales son provocados, nosotros podemos trabajar en la prevención, pero se hace necesario el trabajo del gobierno”.
Desde el Gobierno, la delegada presidencial, Daniela Dresdner salió al paso de estos cuestionamientos, y comentó que existe un trabajo que se está realizando con las agencias del Estado.
“Ya estamos trabajando en la temporada que sigue, con los distintos informes, a lo que se suma lo que ha realizado Conaf con reportes de necesidades para adquirir vehículos y personal. Habrá un trabajo con 142 comunidades para la prevención y patrullaje, lo que es fundamental para evitar la propagación de las llamas”, aseveró Dresdner.
La autoridad agregó que se están incorporando los antecedentes de las 396 investigaciones que realizó la Conaf y que fueron derivadas al Ministerio Público para “conocer lo que hicimos, también se utilizarán los informes de Senapred para tomar las decisiones necesarias”.
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