La historia de superación de un matrimonio de emprendedores en Concepción: “Con esfuerzo y fe en Dios”
Marcelo Salgado y Lorena Valdebenito son una pareja que lleva 8 años juntos. Actualmente, son los dueños de las 6 sucursales que tiene la Distribuidora M y L en Concepción, Santiago y próximamente en Ciudad de México. Sin embargo, su camino hacia el éxito no ha sido fácil. Han logrado superar obstáculos poco a poco después de enfrentar una difícil situación de escasos recursos, donde se vieron envueltos en la droga e incluso ilícitos durante su juventud.
Ambos llegaron a estar tras las rejas por diferentes delitos e incluso contrajeron matrimonio mientras Marcelo estaba en prisión, ya que ella lo iba a ver frecuentemente. El emprendedor contó su historia de superación, recordando que, "estuve en la cárcel, desde que tenía 14 años. A mí me decían el Coca Cola Chico".
Matrimonio confía en su fe en Dios
No obstante, sus vidas tomaron un cambio de rumbo. En conjunto, relataron que al llegar a la Iglesia, dejaron de cometer delitos y dieron vuelta la página. "Empezaron a llegar cosas que creemos que Dios tenía preparadas. Pasamos tantas situaciones y nunca logramos tener nada porque cuando robábamos no éramos felices. Cuando llegamos a Cristo, él nos cambió todo", explicó la pareja.
La pareja explicó que iniciaron como comerciantes ambulantes hace aproximadamente 5 años. En ese entonces trabajaban en la vía pública vendiendo perfumes, ropa, entre otras cosas. Realizaban viajes a Santiago, donde compraban productos chinos para luego venderlos en las calles de Concepción.
"En la pandemia, no se podía salir a vender y necesitábamos generar dinero y eso hizo que buscáramos una forma para poder salir adelante. Durante este periodo intentábamos vender productos a nuestros conocidos y familiares, pero estábamos frustrados por no poder tener una economía estable, tanto para nuestra casa e hijos" sostuvo Marcela.
Detalló que, en ese difícil momento ya llevaban un año asistiendo a la Iglesia. Agregó que "nosotros teníamos una conocida que era gerente en la tienda La Polar donde comprábamos productos que estaban en oferta para luego venderlos". En el transcurso de la pandemia, decidieron ir a preguntar si habían productos disponibles para su compra. Durante esa visita, les ofrecieron artículos en ofertas, pero la cantidad mínima era de 5 mil prendas, lo que equivalía a una compra de 5 millones de pesos.
"Ustedes serán grandes empresarios"
La emprendedora explicó que "esa gran cantidad de dinero no lo teníamos pero si teníamos la palabra de Dios. Quizás mucha gente no lo entiende pero nosotros si, porque un día estando en la iglesia fuimos a un culto y había un pastor que era de Santiago, él no nos conocía y cuando llegamos al lugar nos dijo ´ustedes dos que están atrás pónganse de pie, me dice el Señor que ustedes serán grandes empresarios y les darán trabajo a mucha gente` y confiamos en esas palabras".
En esta misma línea, la pareja sostuvo en conjunto que "Dios nos puso a alguien en el camino que nos prestó esos 5 millones de pesos, para poder iniciar. En ese tiempo vivíamos en Boca Sur, el negocio lo hicimos un día el martes y el jueves nos entregaban la mercadería, inmediatamente empezamos a publicar en todas las redes sociales que íbamos hacer una venta de bodega, nos conseguimos una sede en Boca Sur y fue un éxito, ya que nos alcanzó para devolver el préstamo y para seguir invirtiendo".
"Cuando ya logramos un capital para poder empezar a surgir, fuimos a Santiago y comenzamos a comprar en los chinos mayoristas de a poco cosas de belleza, sombras, labiales, perfumes, productos que estaban de moda en pandemia por Tiktok y nos empezó a ir bien. Nos instalábamos en Boca Sur en la Compañía de Bomberos. Al comienzo trabajábamos viernes, sábado y domingo y después toda la semana, ya que se empezó a vender con cuadras de filas para poder comprar", recordaron ambos.
Primer local en Concepción
La pareja no podían mantenerse en Boca Sur de forma definitiva, por eso buscaron un local. Visitaron distintos lugares y bodegas de Concepción, y un día encontraron un espacio que les llamó la atención en la Calle Cruz 940, donde poco a poco lo fueron arreglando y lo lograron inaugurar a finales de 2021.
La Distribuidora M y L, es mayorista y ofrecen productos electrónicos, de belleza, accesorios de celular, de casa y jardín, menajes, entre otros diversos artículos.
Luego, comenzaron a abrir los otros locales hasta inaugurar uno en Abate Molina en Santiago.
Futuro local en Ciudad de México
Marcelo y Lorena, junto a su familia y unos amigos, visitaron México para disfrutar de una semana de descanso. Ambos describieron ese viaje como "unas vacaciones soñadas, pues "nunca en nuestra vida nos habíamos ido de vacaciones y mucho menos saliendo del país".
"Estuvimos harto tiempo haciendo trámites legales, para no tener impedimento de salir del país. Como ya estamos insertos en el rubro empresarial, cuando llegamos a México miramos y visitamos locales, nos comunicamos con corredores de la ciudad y detectamos harto potencial en el país porque no habían muchos mayoristas como lo que nosotros somos acá y decidimos hacer una sociedad con un amigo que tiene locales en Santiago y abrir una tienda allá" sostuvo Marcelo.
Actualmente, llevan 3 meses trabajando en la remodelación, iluminación y todo el proceso para poder inaugurar una tienda en otro país. "Ha sido todo un desafío con mucho esfuerzo, viajes y esperamos inaugurar a finales de julio" señaló Marcelo.
"Ojalá que nuestra historia sea motivación para muchas personas, que sí se puede cambiar con esfuerzo, compromiso y la fe de Dios", finalizaron en conjunto.
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