Paco sí, paco no, esa no es la cuestión
Poco profesional, descriteriada, miserable y mediocre, fueron parte de los calificativos más ligeros que le expresaron los cibernautas, además de una serie de cuestionamientos de personajes públicos, a la periodista Paulina de Allende - Salazar, tras referirse como "paco" al recientemente fallecido cabo Daniel Palma Yáñez en medio de un despacho matinal para Megavisión.
Sin duda, una expresión desafortunada (poco formal) en medio del dolor y luto institucional que atraviesa Carabineros de Chile debido a la pérdida de tres de sus funcionarios en las últimas semanas. Y en un contexto polarizado y extremadamente politizado producto de las hechos de violencia de mayor connotación social. Un apodo poco adecuado en un ambiente de alta sensibilidad.
Llama la atención que este error verbal cause tal revuelo mediático, incluso mayor que la propia muerte del efectivo policial y que, en algunos casos, las críticas sean más lapidarias para la profesional de las comunicaciones que para los propios responsables de la muerte del carabinero, que son finalmente los delincuentes.
Estamos, afortunadamente, en un país donde existe libertad de expresión y al respecto cada uno puede exponer lo que estime conveniente pero sabemos que especialmente en redes sociales esto da para todo y en este sentido es imperioso guardar las proporciones y no perder el foco de lo realmente importante. Están muriendo personas a manos de la delincuencia, del narcotráfico y del crimen organizado. Carabineros y civiles, están muriendo personas.
Ante el actual panorama, que la casa televisiva haya despedido a la periodista resulta una sanción desproporcionada e incluso visceral, como muchas de las reacciones de la ciudadanía, sin mayor análisis ni argumentos serios.
También habla lamentablemente de la poca memoria histórica que tenemos como sociedad. Quizás muy pocos recuerden que el 19 de noviembre 2020 el diputado Javier Macaya, presidente de la UDI, en medio de una sesión parlamentaria también utilizó la palabra "pacos" y criticó el nombramiento del nuevo general director de Carabineros, Ricardo Yáñez.
“El general director de Carabineros es más zurdo que la chucha. Yo le dije a (Andrés) Chadwick en su momento y no me pescaron”, comenzó relatando Macaya. Agregando que “el presidente de la UDI de San Fernando era vecino de él (...) es de toda la vida de San Fernando y es de una familia de izquierda, izquierda, izquierda. Este vecino es padre de dos pacos, expaco también, y me dice ‘este (...) es de izquierda’” (1) , fueron parte de las palabras del parlamentario, eso sí a él no le costaron su trabajo, tal vez porque es hombre y la "línea editorial del Cámara de Diputados" es mucho más “comprensiva” que la de los canales con sus colaboradores.
¿Por qué paco?
Es cierto, muchas veces la palabra "Paco" es utilizada de manera despectiva o peyorativa para referirse a un efectivo policial pero desde la misma institución han reconocido que es un "Apodo popular para referirse a Carabineros", existiendo una serie de teorías al respecto.
El año 2021 el taller patrimonial y de conservación histórica de la Escuela de Carabineros realizó una investigación sobre el origen del apelativo "Paco". Sí, la misma institución no solo utiliza la denominación, sino que también la investigó y difundió.
En tanto en la edición n°3 2020 de la revista "Hoy como ayer" de la Escuela de Carabineros de Chile señala "La popular palabra "paco" con la que se denomina hoy a Carabineros de Chile, se utiliza tanto entre las filas de la institución, por sus funcionarios al momento de relacionarse entre ellos , como así también entre la ciudadanía que lo utiliza de modo de acercamiento, para generar simpatía con las autoridades policiales, sin embargo, la molestia nace cuando se utiliza de modo peyorativo hacia estos , por lo que dicha es susceptible a las circunstancias y al complemento que se le dé".
Con estos antecedentes resulta bastante extremo que el canal haya adoptado esa decisión y que el General de Carabineros, Álex Chaván, se negara a iniciar el punto de prensa si la periodista estaba en el lugar, eso derechamente es veto y tal como señalaron desde el Colegio de Periodistas de Chile, el Derecho a la Información está por sobre los errores individuales.
"La actuación de la señora de Allende-Salazar, que ha sido de público conocimiento, transgrede abiertamente la línea editorial y las orientaciones programáticas de nuestro medio de comunicación, que todo funcionario, en especial, periodistas deben respetar a cabalidad", indicó la estación televisiva a través de un comunicado.
Volviendo a lo que la propia institución declara, es necesario reflexionar al menos sobre el complemento (ausente) que se le dio a la palabra para que transgrediera la línea editorial y las orientaciones programáticas del canal ¿En algún momento la periodista denostó, injurió o denigró al carabinero? muy por el contrario, reconoció que fue un lapsus, y pidió disculpas de inmediato.
Si el concepto transgrediera la línea editorial, el Reportaje "Pago Gate: El Robo del siglo" del mismo medio de comunicación que fue difundido en junio del año pasado para dar cuenta del mega fraude de la institución, no habría llevado ese título.
En definitiva, hoy en día lo justo resulta ser relativo. Depende del punto de vista, circunstancia o color político con el que se analice. La violencia desmedida no solo se ha tomado las calles sino también las emociones de los telespectadores que actúan como verdaderos verdugos en redes sociales, piden las penas del infierno para algunos y omiten graves responsabilidades para otros. Algunos se ponen xenofobos o individualistas, otros piden sacar los militares a las calles o derechamente que los maten a todos.
Lo cierto es que nada aporta la crítica desmedida y las posiciones extremistas, solo aumentan el nivel de tensión y la división. Llamarle de forma pública “merluzo” al Presidente de la República, o “Paco –“ a un efectivo policial no es lo realmente grave, pero tampoco suma, solo hace que perdamos el foco. Hoy hay una esposa viuda, un hijo de cuatro años y un bebé en gestación que perdieron a su padre (Cabo Palma), evitar por todos los medios que un caso así vuelva a repetirse o que los 10 femicidios y 52 femicidios frustrados que llevamos como país este 2023 sigan aumentando debería ser el centro de la noticia, esa es la cuestión.