Editorial: ¿Qué hacer con las tomas VIP?

En la región no menos de 70 mil familias viven en campamentos irregulares.

Este es un tema permanente, endémico de Chile que no ha podido ser solucionado por ninguna administración de Gobierno. El problema mayor es que este último tiempo las tomas se han multiplicado, por estallido social, por pandemia y por los dichos del Presidente de la República.

Gabriel Boric afirmó en su programa de Gobierno (entendemos con buena intención) que las personas que protagonizaban estas tomas lo hacían porque no tenian donde vivir y por lo tanto no iban a ser desalojados hasta que tuvieran solución habitacional.

Esto último envalentonó a muchos que estaban dudando y finalmente se resolvieron a protagonizar tomas y ahí permanecen. Pero hay un porcentaje de estas tomas de personas que -no teniendo ninguna necesidad de vivienda- buscan algún lugar con gran paisaje (dígase orilla de playa, de laguna o humedal) y se construyen una segunda vivienda para sencillamente descansar.

Y en la región del Biobío hay varios lugares donde ocurre esto, por ejemplo en la hermosa localidad de Colcura en la comuna de Lota.

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¿Quién hace algo con esto?

Lo que hemos notado es que en caso de lugares protegidos como humedales o santuarios (Hualpen) han sido los tribunales de Justicia o Contraloria quienes están ordenado la destrucción de estas viviendas.

Todo esto ocurre mientras el Gobierno (igual que los anteriores) espera por la vía de estudios y proyectos puedan darle solución a este problema. Lo que funcionaria claro, si los gobiernos duraran más de 4 años.

El medio Sala de Prensa editorializó sobre el tema

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