España combate la inflación ofreciendo abonos gratuitos para viajar en tren
España combate la inflación ofreciendo abonos de viaje gratuitos que serán válidos a partir de este jueves.
Después de algunas dificultades con la máquina expendedora de billetes en la majestuosa estación de tren de Atocha, del siglo XIX, Jennifer Bernard Quintana, de 26 años, y su hermana se convirtieron en felices propietarias de abonos de viaje gratuitos.
Con una inflación que supera el 10% interanual, el Gobierno socialista español aspira a reducir el coste de la vida y animar a más personas a utilizar el transporte público proporcionándoles abonos mensuales gratuitos para todas las rutas locales e interurbanas de medio alcance. Quedan excluidos los viajes de larga distancia y los billetes sencillos.
"Creo que es una gran iniciativa", dijo a Reuters Jennifer, que trabaja en el sector de las redes sociales.
"Me encantaría que fuera algo permanente, ya que ayudaría a abaratar las cosas en general y tendríamos más movilidad... es una buena forma de que el Gobierno invierta el dinero que pagamos en impuestos".
Esperan que hayan más de este tipo de iniciativas
Su madre, Toni, de 55 años, dijo que el descuento ayudaría a la familia a ahorrar más de 80 euros al mes en las tarjetas de transporte de sus dos hijas.
"Necesitamos más iniciativas como esta", dijo. "Los padres no podemos pagar más. No tenemos el mismo presupuesto para hacer las mismas cosas con nuestros hijos que antes".
Casi medio millón de personas han reservado ya las tarjetas de transporte gratuitas, y la operadora ferroviaria estatal Renfe espera que el plan, vigente hasta finales de año, se traduzca en 75 millones de viajes ferroviarios gratuitos.
"Es muy fácil de solicitar y utilizar. Dada la situación económica, para nosotros es una gran ayuda", dijo la estudiante de 18 años Anastasia Adamova.
Alemania ha promovido una iniciativa similar, que comenzó en junio y finalizó en septiembre, y que tuvo un gran éxito y redujo los atascos en las principales ciudades.
El plan español, que también incluye descuentos en otros tipos de transporte público, costará 221 millones de euros. Forma parte de un nuevo paquete de ayudas para mitigar la subida de precios, aprobado en junio, por un valor total de 9.500 millones de euros; que incluye reducciones del impuesto sobre el valor añadido y exenciones en las cotizaciones de la Seguridad Social.