Argentina descarta incidente diplomático con Venezuela tras declaraciones por avión retenido en Buenos Aires
Las recientes declaraciones de legisladores de Venezuela descalificando al sistema judicial argentino por el caso de un avión de transporte de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) retenido en Buenos Aires no constituyen un incidente diplomático, aseguró este jueves la portavoz del gobierno de Alberto Fernández.
En los últimos días, el diputado venezolano Pedro Carreño declaró que Fernández debía demostrar si era un "títere" y un "pelele" del "imperialismo", o Estados Unidos, en el caso del avión, el cual debía ser devuelto a Caracas, según sus palabras. Jorge Rodríguez, jefe del parlamento dominado por el oficialismo, calificó de "ladrona" a la fiscal argentina que lleva el caso.
Tras retomar sus buenas relaciones en 2019, con la llegada de Fernández al poder, este fue el más reciente impasse de Caracas con Buenos Aires.
La portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, dijo este jueves que las declaraciones de los representantes del país caribeño eran "expresiones de diferentes actores de la vida venezolana".
"Como muchísimas veces actores de la vida argentina han tenido expresiones muy fuertes con respecto a Venezuela y eso no implica un incidente diplomático", agregó Cerruti.
Poco después en Caracas, el ministro de Transporte, Ramón Velásquez Araguayán, expresó que espera que se "imponga la verdad (...) que la justicia argentina reaccione" y la nave retorne a Venezuela.
Avión se mantiene retenido en Buenos Aires
El ministro y un grupo de diputados venezolanos se reunieron en la sede diplomática con el embajador argentino, Óscar Laborde, para entregarle un comunicado en el que los trabajadores de la aerolínea manifestaron su deseo de que la tripulación y la aeronave retornen.
Cabe destacar que Velásquez Araguayán descartó por ser "absolutamente falsas" versiones de funcionarios de Paraguay en torno a que habría lazos entre tripulantes del avión retenido en Argentina y la organización a la que se responsabiliza por el asesinato en mayo de un fiscal paraguayo en Colombia.
En junio, funcionarios argentinos inmovilizaron un avión que la compañía iraní Mahan Air había vendido a la aerolínea venezolana de transporte Emtrasur por sospechas de terrorismo. El Boeing 747 contaba con una tripulación de 14 venezolanos y cinco iraníes al momento del arribo a Buenos Aires, el 8 de junio.