Último deseo antes de morir: Donó campana al Hospital Regional para los pacientes que egresan de quimioterapia
El repique de una campana de bronce se escucha en gran parte del primer piso del Hospital Regional de Concepción cada vez que egresa un paciente de hematología adultos. El sonido que acompaña aquel momento de alegría, es el regalo que un joven que falleció tras luchar contra una leucemia linfoblástica quiso dejar a quienes lucharon igual que él.
Se trata de la última voluntad de Gonzalo Fuentes Concha, el joven que, al fallecer, pidió a su madre regalar la campana de bronce para que suene, en señal de alegría, cada vez que un paciente egrese de los tratamientos.
“Si ganaste esta batalla, tócala fuerte para que se escuche hasta el cielo”, se lee en la placa instalada junto a la campana que tocan los pacientes al egresar. El joven que deseó que la instalaran tenía 25 años y era oriundo de Quirihue. El falleció a comienzo de este año, tras luchar desde 2019 contra una leucemia linfoblástica.
Pacientes la tocan al egresar
Hace pocos días se anunció del egreso de quimioterapia de Luis Pradel Terán, paciente de hematología adultos, que era esperado por su familia en las puertas del servicio clínico. El acto de celebración tuvo aplausos, felicitaciones, abrazos y palabras de todo el equipo de hematología.
La doctora Mónica Romero, expresó que Luis “es un paciente muy querido por nosotros, que lleva bastante tiempo en nuestra unidad, en quimioterapia por una leucemia mieloblástica aguda, paciente mayor de 60, que afortunadamente ha respondido bien a su quimioterapia”. Explicó que, pese a que al comienzo fue difícil, con el tiempo se adaptó, toleró tuvo buena respuesta.
Hace una semana, don Luis se sentó en la silla de ruedas en que debe salir el paciente de su hospitalización. Entre aplausos llegó, tomó el lazo de la campana y golpeó con energía, varias veces, disfrutando el canto de la campana que avanzó por los pasillos del hospital. Era lo que Gonzalo, quien la trajo al hospital, quiso dejar a otros pacientes.
Cabe indicar que en el servicio de hematología adultos, los pacientes se hospitalizan y asisten a sesiones de quimioterapia. Acuden personas de toda la región. En su mayor parte padecen linfomas y Leucemia, enfermedad agresiva, que puede ser aguda o crónica y se entienden como la presencia de células malignas en la sangre. El tratamiento es largo, con hospitalizaciones frecuentes.
Aquello fue el caso de Gonzalo Fuentes, quien, durante su tratamiento de muchos meses, se hizo conocido y querido e incluso, organizó campañas de apoyo para niños con cáncer y de reclutamiento de donantes altruistas de sangre. En enero de este año, el joven falleció dejando como legado una campana de bronce para que cada paciente que egrese de quimioterapia pueda tocarla en señal de triunfo.