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La gran crisis de Fernández Vial que lo tiene lejos de ascender. La escuadra aurinegra, ante 2.076 espectadores en el Ester Roa Rebolledo, volvió a ceder una chance en la Primera B para dar la pelea, al menos, por un puesto en la liguilla y cayó por 1-0 ante el AC Barnechea, que alcanzó su tercera victoria consecutiva con John Armijo a la cabeza.

Está claro que por el funcionamiento, por la desidia y por el temple, Fernández Vial da la pelea. Eso no está en discusión. Sin embargo, el gran problema es que queda claro es que los jugadores no están entendiendo el mensaje y algo está impidiendo que los futbolistas no muestren el rendimiento al que están habituados.

Los chispazos de buen juego solo son esos, chispazos. No hay un juego punzante, sostenido y ofensivo por un tiempo constante. Eso, claramente, le duele al hincha y también a los mismos jugadores, también a Claudio Rojas, quien trabaja y eso se ve. Sin embargo, el golpe y los cambios tendrán que ser de 180 grados para tener un efecto pronto.

En el 23', Gustavo Gotti y Ethan Espinoza, dos de los peligrosos en esta jornada para el local, se juntaron y llevaron peligro a la meta de Cristián Campestrini, quien mostró su experiencia en estas lides y evitó el gol en su portería en una de las pocas llegadas consistentes de peligro. En la segunda parte, el "Barne" alcanzó el tanto en el 79', un centro de Cubillos y apareció la cabeza de Juan Ignacio Duma, quien le ganó al Jeri Carrasco para meter el único tanto del partido.

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Tras cartón, Harbottle, de irregular cometido, pateó desde fuera del área y arremetió como un toro Gotti, quien tocó el balón y la pelota no quiso ingresar a la meta de Campestrini. Vial no gana desde el 7 de marzo. De ahí, Rojas y sus muchachos hace 69 días no festejan. Tarea dura y misión que esperan no sea imposible.