Arturo Vidal se querelló contra uno de sus familiares: Apuntó a administración desleal
El futbolista Arturo Vidal se querelló contra uno de sus familiares, su primo Carlos Albornoz Pardo, psicólogo con Magister en Negocios que administra propiedades y proyectos.
En 2014, ambos habían decidido crear la Sociedad Inversiones Vidal SpA, valorados en más de US$10 millones. El mediocampista confió en él para que le controlara sus inversiones en Chile.
De acuerdo a la Unidad de Investigación y Datos de La Tercera, Vidal lo que hizo fue presentar una querella contra él y quien resulte responsable por los delitos de administración desleal y celebración de contrato simulado. Se ingresó el pasado 21 de abril en el 7° Juzgado de Garantía de Santiago.
En concreto, el futbolista lo acusa de traspasos de propiedades, solicitudes de préstamos, deudas millonarias y múltiples demandas civiles a los negocios en el país.
Los abogados de Vidal señalaron que "nada de esto consta documentado, ni mucho menos fue informado a nuestro representado, disponiendo durante todos estos años el señor Carlos Albornoz de la sociedad y su composición a su antojo, sin informar ni rendir cuentas a nadie, especialmente al accionista mayoritario, don Arturo Erasmo Vidal Pardo".
Las primeras sospechas de Vidal
Las primeras sospechas que tuvo el "Rey Arturo" fue en relación a dos canchas de tenis y un arriendo que dejó de ser depositado en la cuenta corriente de una de sus empresas.
La querella, a la que tuvo acceso el citado medio, sostiene que en 2020, cuando estaba definiendo su futuro tras no ser considerado en Barcelona, Carlos Albornoz tomó decisiones en lo financiero que Vidal no sabía.
El 25 de junio de 2020, su primo, en representación de Inversiones Vidal II SpA, se transfirió a sí mismo la parcela N°21. Ahí están ubicadas las canchas de tenis del Club Chicureo.
En los registros oficiales dicha transacción figura como una compraventa y tuvo un valor equivalente a 7000 UF, es decir, unos $200 millones. "Por si fuera poco, dicha suma de dinero jamás ingresó a la sociedad, lo cual se verá reflejado en los Balances y Estados Financieros reales de la compañía", dijo Vidal.
No fue lo único, ya que el futbolista también descubrió que habían préstamos solicitados por Inversiones Vidal II SpA a la banca por más de $4 mil millones. Ello entre enero del 2020 y diciembre del 2021. Él figura, de hecho, como aval personal en caso de no pago.
La acción judicial señala que "lamentablemente, según se acreditará en la etapa procesal pertinente, el dinero proveniente de los préstamos solicitados por don Carlos Albornoz en representación de la sociedad jamás ingresaron a esta última, es más, estos fueron destinados al financiamiento de otra empresa, a saber, la sociedad Manufacturas de Productos de Aluminio y otros Limitada".
Dicha empresa hasta julio del 2018 tenía entre sus socios a Carlos Albornoz Pardo. Sin embargo, hoy el único dueño es Víctor Albornoz Pardo, otro primo de Vidal.
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Un tercer involucrado
En 2014, el deportista creó la compañía Área 23 SpA y confió en su primo Carlos Albornoz las funciones de administración y poderes del negocio. Dicha compañía pasó a administrar el Club Chicureo, proyecto deportivo que se construyó en Colina. La sociedad es la que contrata a los trabajadores del club y paga por el arriendo de los terrenos e instalaciones a Inversiones Vidal SpA.
En este contexto es donde sale el nombre del ingeniero comercial Marcelo Henríquez Pardo. Vidal apunta a que él "asumió de facto funciones de dirección del Club, sin estar contratado por la sociedad Área 23 SpA".
La incorporación de Henríquez derivó para Vidal en una mala administración del Club Chicureo, "con 12 demandas laborales en contra de dicha sociedad".
De estos, 9 "corresponden a cobranza judicial por no pago de cotizaciones previsionales" y demoras de hasta dos meses en el pago de los sueldos.
Es más, la acción judicial sostiene que "los espacios de los trabajadores están en la precariedad absoluta, sin contar siquiera con uniformes de trabajo".
Vidal descubrió que esta empresa también registró operaciones de crédito y préstamo con la banca, por cerca de $ 94 millones. La querella indica que se trató de un "financiamiento que, nuevamente, no ingresó a la sociedad".
Marcelo Henríquez no logró ser contactado por el equipo de LT, mientras que Carlos Albornoz indicó que desconocía la información.
"Yo nunca he estado involucrado en ninguna cosa periodística y no me interesa. De hecho ni sé de la querella, no tengo idea de la querella. Yo no necesito hacer descargos de nada, desconozco todo lo que me está diciendo", dijo.