Todo lo que debes saber antes de comprar un saco de boxeo

La historia del boxeo es mucho más antigua de lo que muchas personas creen. En la Antigüedad no existían las reglas actuales, tampoco la indumentaria ni los guantes. Es un deporte que se practica desde hace miles de años, que si bien ha tenido cambios de reglamento y de formato de disputa, es una actividad muy antigua entre los seres humanos.

Comienzos de la disciplina

Según los expertos, el boxeo como actividad deportiva tiene registros antiquísimos. Algunos aseguran que esta forma de lucha ya existía en tierras africanas desde varios siglos antes de Cristo. Por otro lado, el boxeo ya era aceptado como Deporte Olímpico por el Año 688 A.C. Lo que demuestra la tradición milenaria que tiene este deporte en la vida humana.

Los  participantes en estos juegos eran entrenados con sacos de boxeo arena, que los griegos de aquella época llamaban “korykos”. A su vez, los púgiles mantenían los dedos libres, llevando correas de cuero en las manos y muñecas. En algunos casos, también se veía a los boxeadores cubrirse los antebrazos con estas tiras de cuero, el objetivo era prevenir lesiones en esa zona.

El “Boxeo” como diferencia de las peleas callejeras

La palabra “boxeo” comenzó a usarse en la Inglaterra del siglo XVIII para distinguir entre la lucha para resolver disputas y la lucha bajo reglas establecidas como deporte. Ahora se utiliza para describir un deporte en el que dos contrincantes (púgiles) llevan guantes acolchados, se enfrentan en un cuadrilátero y pelean un número acordado de asaltos siguiendo unas reglas. Aunque los hombres siempre han sido los participantes más numerosos, existen referencias a peleas entre mujeres durante el siglo XVIII, y a finales del siglo XX se organizaron de nuevo luchas femeninas.

El Boxeo es considerado un deporte en el que dos luchadores se enfrentan golpeándose, de acuerdo a un preciso reglamento, con los puños recubiertos por unos guantes especiales y el torso desnudo por los profesionales. La primera codificación de las normas que regulan los encuentros de boxeo se remonta a 1743, mientras que las reglas todavía vigentes fueron establecidas en 1889 por el marqués de Queensberry, quien entre otras cosas introdujo el uso de los guantes.

Ventajas de introducirse en el entrenamiento del boxeo

Una de las características que reúne a todos los púgiles, de todas las categorías y géneros, es que son personas con cualidades físicas notables. A simple vista se puede observar en el cuerpo de los boxeadores y de las boxeadoras el trabajo realizado previo a los combates.

Para poder subirte al ring hay que atravesar períodos de entrenamientos de alta exigencia y mucha disciplina física y mental.  Pero, ¿Qué trabajas cuando entrenas? Bueno, te ayuda física y mentalmente. Trabajas coordinación, resistencia, pierdes peso, defines y tonificas los músculos. Un plus es que despiertas tus sentidos, por lo que tu mente evoluciona más rápido y tus reacciones serán casi inmediatas.    

Los que dicen que solo tonificas brazos, espalda y pecho están en un error. Si alguna vez viste una película de Rocky comprenderás que los ejercicios son correr, saltar la cuerda, hacer pesas, lanzar golpes, trabajar el abdomen y piernas.

Los ejercicios de alto impacto que se practican en el boxeo mejoran tu capacidad aeróbica y tu circulación. También afecta a la resistencia anaeróbica, ya que la mayoría de los movimientos se realizan a gran velocidad. Otro punto que plantea la práctica de este deporte es que la configuración en rondas de tres minutos con descansos de un minuto, se llama entrenamiento por intervalo. Este tipo de entrenamiento ayuda a mejorar la salud cardiovascular, a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, provoca un aumento de la circulación sanguínea, mejora el sistema respiratorio y reduce la presión arterial.

El saco de box, compañero histórico de los púgiles

Uno de los elementos fundamentales de entrenamiento son los sacos de boxeo. Ya desde los antiguos Juegos Olímpicos, este elemento era sinónimo de la disciplina. Con el paso del tiempo, el saco se consolidó como elemento indispensable de la actividad. A su vez, las nuevas tecnologías y el desarrollo de diferentes elementos han hecho que actualmente haya diversos tipos.

El saco de boxeo puede variar de tamaño. Si bien no existe una tabla de medida que marque el tamaño que debe tener tu propio saco, se recomienda que su peso sea al menos de la mitad del peso del púgil para optimizar el rendimiento de los entrenamientos.

Material: Antiguamente se trataba de sacos de telas gruesas mayormente rellenos de arena. Esto generaba que con el paso del tiempo las bolsas se rompieran y no fueran útiles. A su vez, golpear constantemente la arena solía generar lesiones en las manos de los boxeadores.

Actualmente existen sacos de boxeo de agua, incluso hay sacos de pelotas pequeñas de gel que previenen el roce y los golpes en los puños de los púgiles. 

Por otra parte, el tipo de soporte puede ser diferente según su agarre y material con el que esté hecho. A su vez, las empresas modernas ofrecen diferentes tipos de sacos para distintos tamaños y edades. Everlast es una de las marcas de punta en elementos de entrenamiento para este deporte. Incluso cuenta con sacos de boxeo para niños.

Esta marca es de las más reconocidas en el mundo profesional y amateur. Los sacos de boxeo Everlast son de los más utilizados debido a su calidad y durabilidad.

Boxeo: Un estilo de entrenar que te ayudará a ponerte en forma

Al ser un entrenamiento aeróbico, el boxeo quema más grasas y por ende, más calorías, gracias a su gran desgaste energético. Se ha calculado que se queman alrededor de 750 calorías por hora, siempre dependiendo de la intensidad del entrenamiento que se realice. Entre los ejercicios que más queman calorías y que forman parte del entrenamiento del boxeo, están saltar a la comba, sprint corriendo, golpear el saco y los combates. En esa línea, debido al tipo de entrenamiento, los brazos y las piernas estarán más tonificados y más fuertes.

Además, también mejora la flexibilidad muscular debido a los continuos y veloces movimientos que hay que realizar al practicarlo.

El boxeo trabaja el cuerpo desde los pies hasta la cabeza. Cuando se golpea, se trabaja el pectoral y los tríceps. Si proteges el rostro con los puños, ejercitas el músculo deltoides.

 Cuando te desplazas, estimulas el cuadriceps; y al esquivar y atacar, trabajas la musculatura lumbar. Practicar deporte ayuda a mejorar tu autoestima y seguridad.

Pero la satisfacción que puede generar el boxeo no tiene que ver estrictamente con lo físico. Tener una mayor práctica y sentirte capaz de realizar diferentes y complicadas combinaciones, hace que tengas una mayor satisfacción personal. También ayuda a vencer la timidez y a tener una mayor felicidad.